Etiqueta: Tarjetas gráficas

El uso de la memoria gráfica GDDR ha tenido poca repercusión fuera de las tarjetas gráficas o sistemas relacionados como las consolas, pero con la inminente llegada al mercado de la GDDR6 las cosas pueden cambiar. Micron se ha asociado con otras tres empresas para simplificar y reducir los costes de la implementación de esta memoria en proyectos de todo tipo, aunque inicialmente ponen el centro de atención en el sector del automóvil, los chips de propósito específico ASIC y FPGA.

A pesar de todo lo prometido por AMD en los últimos meses, las tarjetas gráficas Radeon RX Vega no han llegado a estar con buena disponibilidad en ningún momento, y con ello me refiero a los 499 euros a los que debería haber vendido la RX Vega 64. La suerte de los modelos personalizados de las ensambladoras no ha sido mucho mejor, ya que tampoco han llegado prácticamente a las tiendas. Se agotan en las distribuidoras, vendiéndolas en gran volumen a unos pocos clientes.

La compra de tarjetas gráficas para minar criptomonedas es algo que últimamente se está haciendo muy presente en el mercado e influye en su precio por falta de stock. En muchas ocasiones se ven tarjetas por el doble o incluso el triple de su PVPR (precio de venta al público recomendado) y es normal ver una RX 580 de 50 o 100 € por encima del este precio y no digamos las Radeon RX Vega 56 y 64, actualmente casi 200 € por encima de su PVPR. Este mercado hace que mucha gente vea las tarjetas gráficas como impresoras de dinero, comprando todas las que pueden para generar el máximo beneficio posible con ellas y llegando a alquilar aviones del tamaño de un Boeing 747 para el transporte de las mismas.

Desde hace meses los fabricantes de chips de memoria han ido dando los últimos retoques a la producción de la memoria GDDR6, que ya indicaron que sería utilizada en algunas tarjetas gráficas que llegarían a principios de 2018. Samsung ya ha iniciado la producción de su memoria GDDR6, pero SK Hynix va un paso más allá al indicar en su catálogo que este tipo de memoria ya está disponible para sus clientes.

Lo más destacado del CES en el sector de los procesadores fue el anuncio de los primeros modelos que usan una CPU de Intel con una GPU dedicada de AMD con memoria HBM2 en el mismo empaquetado. Estos Kaby Lake G tienen una GPU de 20 o 24 unidades de cómputo (CU), denominadas RX Vega M GL y GH. Para tener la potencia de una GTX 1060 deberían tener 32 CU. Como he dicho en otras ocasiones preveía un rendimiento similar al de la GTX 1050 de movilidad para la GL y cerca de la GTX 1050 Ti para la GH.

Nvidia mantiene un férreo control en el sector de las tarjetas gráficas de gama alta, y lo ha revalidado aún más con la presentación y venta de la GTX 1070 Ti. Es un modelo que compite directamente tanto con la Radeon RX Vega 56 como la RX Vega 64 de AMD, pero también lo hace con la GTX 1080 de la propia Nvidia. Pero a diferencia de las RX Vega, los modelos personalizados han llegado en gran cantidad y con buena disponibilidad.

En los últimos días cada vez son más los mensajes que he recibido, a través de Disqus o el correo, diciéndome que por qué los precios de las tarjetas gráficas han subido. Si bien algún lector siguió mi consejo de mirar una GTX 1070 Ti a tiempo y antes de la subida, otros pospusieron su compra y se han encontrado con un desabastecimiento general de algunos modelos, así como precios que han subido bastante. El causante de todo esto vuelve a ser la criptominería de Ethereum, aunque también tiene que ver la temporalidad por las ventas navideñas.

Intel ha hecho varios movimiento más que interesantes en los últimos meses de cara al sector de las unidades de procesamiento gráfico (GPU). Primero anuncia la llegada de procesadores Kaby Lake G que contendrían un chip gráfico dedicado, y luego llegó el anuncio del fichaje de Raja Koduri, exdirector en AMD de la división de Radeon Technologies, para dedicarse al desarrollo de nuevas arquitecturas gráficas. Se presupone que inicialmente para entorno empresarial para competir en computación con AMD y Nvidia, pero es obvio que lo que desarrolle Koduri llegará al sector consumo.

Nvidia presentó el pasado mayo una versión bastante especial llamada Max-Q de tres de sus tarjetas gráficas de movilidad —GTX 1060, GTX 1070 y GTX 1080—, que contaba con unas características algo inferiores pero permitía a los fabricantes de portátiles y todos en uno configurar su consumo entre un margen determinado. Eso llevaba a que, en el punto inferior de consumo, seguía siendo más potente que el modelo inmediatamente inferior —por ejemplo, la GTX 1070 Max-Q frente a la GTX 1060—, pero su consumo se reducía enormemente —80 W de la 1070 Max-Q, frente a los 110 W habituales, y los 80 W de la GTX 1060—.

Tengo una visión bastante especial sobre las tarjetas gráficas externas, porque las veo como una forma de dotar de mucha más vida útil a un portátil, ya sea genérico o para juegos, de la que tendría normalmente. Al menos, para aquellos que tienen una conexión Thunderbolt 3, la cual ya veo como imprescindible —al menos para mis compras—. Lenovo ha presentado una interesante base de acople para equipos con TB3, que además de proporcionar conectividad adicional añade una GTX 1050.