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Intel anunció la semana pasada una expansión de su línea de procesadores Core de sobremesa de 9.ª generación. La nota peculiar de estos nuevos modelos es que no disponen de unidad gráfica integrada, y faltaba que Intel diera los precios de estos nuevos procesadores. Se podría presuponer que al carecer de unidad gráfica integrada (iGPU) serían más baratos, pero nada más lejos de la realidad.

Una de las novedades que dejó Intel el año pasado fueron una serie de procesadores denominados «Core i+». En realidad no son procesadores de por sí, sino unos combos o lotes de procesador Core de 8.ª generación acompañados de una memoria Optane de 16 GB para hacer de caché de una de las unidades de almacenamiento del equipo. Con un disco duro alega que se puede ir de media 1.7 veces más rápido, y hasta 4.7 veces en ciertos casos. Estos lotes están en proceso de descatalogación por parte de Intel como ha indicado en un aviso emitido a sus socios.

Intel tiene un año interesante por delante, y entiéndase por ello uno en el que tienen que llegar seguro los procesadores a 10 nm o se enfrentará a un futuro incierto. Pero mientras tanto se tiene que centrar en lo que ya tiene, y según AnandTech eso también pasa por un nuevo procesador denominado Core i9-9990XE pero que no llegaría a las tiendas directamente, sino que recurriría a un método algo más especial para ponerlo en manos de los ensambladores de equipos: la subasta.

AMD está teniendo un momento dulce en el sector de los procesadores, por méritos propios acompañados por un gran problema de producción de Intel de sus procesadores que llevó hace unos meses a sus procesadores a precios desorbitados, si bien todavía siguen bastante altos. La próxima llegada de los procesadores Ryzen 3000, que AMD ha indicado que será a «mitad de 2019» —seguramente durante el verano boreal—, suscita las habituales preguntas sobre las actuales placas base AM4.

AMD ha puesto todas las castañas en el fuego al cambiar la forma de crear procesadores para los Ryzen 3000 de sobremesa. En lugar de diseñar un único chip con todas las funcionalidades, ha diseñado dos: un chip solo con los núcleos de procesamiento o chíplet; y un chip de control que hace la entrada/salida del procesador y acceso a memoria, entre otros. La idea detrás de la palabra chiplet es que son chips que necesitan otros chips o chíplets para funcionar. Cuando Lisa Su mostró un procesador Ryzen 3000 se abrieron múltiples especulaciones.

AMD ha avanzado en el CES 2019 la próxima llegada de los procesadores Ryzen 3000, pero los que esperaran que llegaran ya tendrán que esperar. La compañía ha indicado que llegará a mitad del año, entre el segundo y tercer trimestre, con suerte a finales de la primavera, por lo que todavía habrá que esperar en torno a seis meses. Aun así, ha dado algunos detalles adicionales de estos procesadores que resultan de interés.

Intel anunció hace unas semanas el desarrollo de Foveros, una tecnología para crear procesadores utilizando varios chips apilados de distinto propósito. Esto permite, por ejemplo, crear una capa con los núcleos de procesamiento en sí, otra con la conectividad externa —memoria, PCIe, etc.—, u otras en función del diseño del procesador, y todas conectadas por un intermediador. Las ventajas tienen que ver con aumentar el rendimiento de producción de las obleas a la vez que permitir un diseño modular de los procesadores y ahorrar espacio. Sobre todo esto último.

Según estaba previsto, Intel ha tenido una conferencia interesante en el CES 2019, si bien tampoco es que haya habido grandes novedades. Como siempre, las promesas de que los procesadores de 10 nm llegarán este 2019 a las estanterías. Mientras tanto, va a expandir la 9.ª generación de procesadores Core con diversos modelos que no tienen unidad gráfica integrada (iGPU), o más bien que la tienen desactivada. Pero también hay uno nuevo que no había sido presentado anteriormente.

Hay una corriente cada vez mayor en internet de probar ciertas cosas tecnológicas pero sin molestarse a saber la motivación detrás de ellas. Aunque tengo cierto respeto por Der8auer por su faceta de overclocker, en el que hace un buen trabajo, ciertamente no está tan versado en los principios básicos de los procesadores. Y esto que digo lo explicaré tras la introducción de la noticia.

No es ningún secreto que en la próxima década el producto que más va a evolucionar es el automóvil, o al menos así lo están vendiendo todas las compañías tecnológicas, desde Nvidia hasta Apple. Para esos sistemas están llegando multitud de procesadores y arquitecturas específicas, ya que es un sector muy escrutado por los gobiernos para asegurarse de que los vehículos y sus sistemas son totalmente seguros. Productos como el Cortex-A65AE de ARM para conformar procesadores para vehículos autónomos son la norma ahora mismo, pero también hay que tener en cuenta los sistemas de infoentretenimiento.