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Intel ha mostrado en alguna que otra ocasión los nuevos sistemas de refrigeración para centros de datos con los que estaba experimentando. El más chochante es el de la refrigeración por inmersión en fluido/líquido o simplemente refrigeración por inmersión, que es mejor decirlo así que «refrigeración líquida por inmersión» porque es una definición procedente de webs anglosajonas que es totalmente errónea y se está dejando tal cual en las traducciones literales de las seudowebs de seudotecnología en seudoespañol/spanglish. La última inversión de Intel son 700 millones de dólares en un centro de investigación orientado a la refrigeración por inmersión.

El aumento de potencia de los procesadores se puede conseguir de varias formas: mejoras en la tubería de procesamiento de instrucciones, mejoras en las microinstrucciones, cambio de litografía, o con el aumento de la caché, entre otros. La caché es básicamente fundamental para evitar que la memoria sea un limitante porque a más instrucciones procesadas por segundo más caché tiene que haber, sobre todo en la arquitectura usada por Intel de ejecución especulativa. Ahora los últimos rumores apuntan nuevamente a que Intel va a aumentar sustancialmente la caché de sus procesadores Raptor Lake.

Lo mejor de la nueva versión de la superresolución de FidelityFX (FSR 2.0) es lo mismo que en la versión original: funciona igual de bien en cualquier unidades gráfica y sistema operativo. Al final se introduce en la tubería gráfica como si fuera un filtro, al final del proceso, y por tanto no hay que hacer un esfuerzo demasiado grande para incluirlo. Bueno, FSR 2.0 necesita un poco más de trabajo porque precisa de cierta realimentación de información de fotogramas anteriores, pero la plataforma en que se use no es un problema. En estas incluyo las unidades gráficas de Intel.

El 20 de mayo llega a las tiendas Dolmen, e iba a ser el primer juego en implementar XeSS (supermuestreo de Xe) de Intel, y hasta la semana pasada la compañía apuntaba a que así sería. El productor del juego aseguró que llegaría como parche de día uno al juego, pero resultaba bastante extraño debido a los distintos problemas que está teniendo Intel con los controladores gráficos y sistemas relacionados de las Arc. Finalmente la compañía ha salido a Twitter para decir que XeSS se retrasará.

Intel ha establecido un nuevo plan de lanzamiento de las tarjetas gráficas Arc para equipos de sobremesa, y todo pasa por un lanzamiento gradual centrado en China para luego extender su venta al resto del mundo. No parece que vayan a estar ampliamente disponibles hasta el cuarto trimestre de este año. Como tendrá que ajustar su precio a la realidad de un mercado a la baja tras el criptocrac, me imagino que aportarán una buena relación rendimiento-precio. No es una cuestión de qué potencia máxima tendrán, sino de su precio. Como siempre.

Intel ha creado su versión del DLSS de NVIDIA a la cual llama XeSS, aunque en este caso funciona en cualquier GPU. Aun así, las Arc serie A incluirán unas unidades de procesamiento vectorial (XMX) que acelerarán un poco más este supermuestreo por inteligencia artificial. Los desarrolladores de Dolmen aseguran que el juego tendrá acceso a XeSS desde el día de su puesta a la venta, el cual es el 20 de mayo.

Los procesadores Meteor Lake serán los primeros de Intel en llegar al público general siendo un módulo multichip (MCM). En su interior habrá cuatro chíplets (CPU, GPU, E/S y SoC), y ahora una web francesa que ha asistido a la conferencia Vision que está celebrando Intel ha podido compartir la planta de uno de estos chíplets de CPU y que podéis ver más abajo.

Intel va a dar un importante paso adelante en la forma en que produce sus procesadores cuando el próximo año lleguen los Meteor Lake que conformarán parte de los Core de 14.ª generación. La novedad está en que serán varios chíplets unidos con EMIB y usando Foveros para el proceso de encapsulamiento. Intel ha mostrado dos de los prototipos en paquetes diferentes, que serían de tamaño normal y uno de alta densidad para equipos más pequeños.

Intel ha anunciado finalmente los Alder Lake HX, los procesadores Core de 12.ª generación que usan el chip de dieciséis núcleos que hasta ahora estaban reservados para los equipos de sobremesa. Estos procesadores suben su consumo de los 45 W a frecuencia base hasta los 55 W, y su consumo máximo pasa a ser de 157 W. Eso no significa que siempre a frecuencia base consuman 55 W y que siempre a frecuencia máxima consuman 157 W. Son valores máximos.

Las tarjetas gráficas Arc de Intel se están haciendo de rogar, pero hay que romper una lanza en favor de Intel porque los dos últimos años no han sido fáciles en el mundo y son su primer producto en un nuevo sector como es el de las tarjetas gráficas de consumo. Aun así, quedan seis meses o menos para que lleguen nuevas series de AMD y NVIDIA, por lo que Intel solo podrá tener éxito si ajusta el precio al rendimiento que tengan frente a su competencia. Ahora la compañía habla sobre estos problemas y el lanzamiento de los modelos de sobremesa.