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Dentro de la familia de procesadores para servidores y entornos profesionales, Intel ha renovado los Xeon E5 adaptando la arquitectura Haswell a un nivel de integración menor de 14 nm de los Broadwell. Los nuevos modelos incluyen algunas mejoras de características interesantes, aunque también de cara a consumo y potencia.

Intel lleva un par de años que no sigue la ley de Moore al pie de la letra, aunque es sobre todo por las limitaciones de las actuales tecnologías litográficas con que se producen los chips. Se solucionará con las técnicas de litografía del ultravioleta extremo, pero para eso necesita invertir aún miles de millones de dólares en investigación.

Intel estaba pendiente de anunciar la llegada de Skull Canyon, los procesadores Skylake con gráfica integrada Iris Pro, y finalmente lo ha hecho con la presentación de un nuevo NUC, el nombre de la gama de los mini-PC de la compañía. El primer procesador de este tipo en llegar es el Core i7-6770HQ con gráfica integrada Iris Pro 580.

Intel está decidida a retomar la senda de la ley de Moore, pero hasta que pueda conseguirlo, este año llegará una tercera generación de procesadores a 14 nm para ganar tiempo. Se trata de Kaby Lake, y es una arquitectura que traerá solo las ya habituales ligeras mejoras de rendimiento. Según una imagen publicada por Benchlife de la supuesta hoja de ruta de Intel, Kaby Lake llegará en el tercer trimestre, en agosto o septiembre.

Llevo unos años siguiendo la evolución de las soluciones de gráficas externas, y desde que el año pasado Intel anunciara su alianza con AMD para dar una solución definitiva a este terreno a través de Thunderbolt 3, la ilusión de que se haga realidad ese sueño está ya muy cerca.

La realidad aumentada sigue dando de qué hablar últimamente, porque cada vez más compañías apuestan por crear equipos para utilizar esta tecnología. A diferencia de la realidad virtual, que se basa enteramente en visuales generados digitalmente, la realidad aumentada te permite ver el mundo real que te rodea, solo le agrega imágenes o información adicional.

En los últimos meses Intel ha redoblado esfuerzos para que en los años venideros se pueda volver a cumplir con la ley de Moore, por la cual el nivel de integración al que se fabrican los chips se reduce, duplicando sobre el papel el número de transistores que incluyen.

ASRock dio los primeros pasos la semana pasada para eliminar el overclocking de los procesadores Skylake no K en sus placas base distribuyendo una actualización para las mismas. Eso significa que las futuras placas usarán esta BIOS de fábrica, por lo que los que quieran seguir haciendo overclocking a sus procesadores Skylake no K, mejor que no se actualicen.

Las competiciones para demostrar el potencial de overclocking de los procesadores son bastante habituales, y el pasado mes de noviembre Asus anunciaba que se habían alcanzado los 7007,85 MHz en una de sus placas con un procesadores Core i7-6700K. Ahora ese récord ha sido superado, aunque por poco.

Unos pequeños pero importantes cambios en la arquitectura de los procesadores Skylake permite un overclocking más granular para sacar el máximo provecho a cada chip. Pero de forma indirecta permite el overclocking de cualquier procesador, incluso los no preparados para ello, mediante la modificación de su frecuencia base (BCLK), y es algo que AsRock, EVGA y BioStar ofrecen de manera oficial, y Asus y MSI de manera oficiosa.