Intel ha reforzado en sus últimos años su estrategia de expandirse a nuevos sectores y uno en el que más está apostando es en el de la inteligencia artificial (IA). Eso ha motivado varias de sus compras más reciente, y otras que lo sitúan a la cabeza del sector de FPGS y ASIC como fue la del fabricante de chips Altera. Ahora ha optado por comprar a Habana Labs por 2000 millones de dólares.

Esta empresa israelí está especializada en el desarrollo de aceleradores programables de aprendizaje profundo, una rama de la inteligencia artificial y una subrama del aprendizaje automático dedicada a transformar ciertas observaciones como pueda ser una imagen en representaciones de datos transformables. Esos datos pueden ser utilizados posteriormente para inferir el contenido de una imagen no vista antes en base a esas imágenes previamente analizadas.

Intel expone que durante 2019 espera haber generado unos ingresos de 3500 millones de dólares de sus productos relacionados con la inteligencia artificial, o un 20 % más que en 2018. Los productos de Habana Labs, mayormente chips para centros de datos, se mantendrán como un negocio diferenciado al de Intel.

El principal de ellos es el procesador de entrenamiento de IA llamado Gaudí en fase de testeo, el cual tendrá un ancho de procesamiento cuatro veces superior al de sistemas con un número equiparable de unidades de procesamiento gráfico. Por otro lado, el sistema Goya es un procesador de inferencias con un alto rendimiento y bajo consumo. A partir de estos sistemas y con el empujón de Intel, la compañía los evolucionará más rápidamente.

Vía: Guru3D.