Uno de los productos más enigmáticos de los últimos tiempos es la Radeon VII, que algunos comparan con la Radeon Pro Duo. Si AMD pretendía demostrar lo que era capaz de conseguir con una unidad gráfica fabricada a 7 nm, ciertamente está lejos de haberlo logrado. Hay más comentarios negativos que positivos, si bien no es por la tarjeta en sí, sino por dos aspectos: el precio al que ha llegado, nada competitivo; y que solo exista el ruidoso modelo de referencia. Tampoco ha ayudado que AMD haya cometido el error de que la Radeon VII no se pueda arrancar en modo UEFI.

Esto hace que, para usar la tarjeta gráfica, la UEFI tenga que arrancar en el modo compatibilidad con BIOS, el sistema de arranque antiguo de los PC si bien se sigue usando ese término, «BIOS», para lo que habría que llamar «UEFI». Sin este arranque en UEFI, Windows 10 no puede realizar un arranque seguro, lo que significa que intentará arrancar cualquier dispositivo conectado, permitiendo así que un malware que sustituya a una partición de carga sea ejecutado durante el arranque del equipo. Con el arranque seguro activado solo se ejecutarán los sistemas operativos y dispositivos que estén firmados y certificados, lo cual no incluye Linux —en distribuciones antiguas— o macOS a través de un hackintosh.

Por tanto, puede ser una molestia que la Radeon VII no permite el arranque UEFI, y por tanto el arranque seguro, para muchos usuarios. Por eso AMD ha distribuido ya una actualización del BIOS de la propia tarjeta gráfica, si bien hay que realizar una actualización manual; distribuirá un instalador en breve para que se haga con un simple clic. Este nuevo BIOS ya está en manos de los fabricantes de tarjetas gráficas, y ASRock ya ha distribuido la actualización a través de su web. Es una actualización que se puede instalar en cualquier modelo de Radeon VII sin problemas.

Vía: TechPowerUp, TechPowerUp (2).