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Después de hablar de las primeras RTX 40 y de DLSS 3 es el turno de la arquitectura Ada que potencia las GPU de estas nueva generación de tarjetas gráficas de NVIDIA. Es interesante en todos los terrenos porque no deja muchas cosas sin tocar, aunque se puede intuir rápidamente que no hay grandes cambios en lo que es la arquitectura de los sombreadores.

Con la cantidad de información que ha dado NVIDIA en la última GTC de este año hemos tenido que expandir la información en una buena cantidad de artículos, y solo hemos cubierto lo relacionado con las RTX serie 40. Me falta hablar de dos cosas: DLSS 3 y de la arquitectura Ada en sí. Sobre lo último estoy esperando a que haya información completa, aunque hasta que no se publique el libro blanco de la arquitectura Ada solo se podrán comentar generalidades.

NVIDIA ha anunciado su siguiente generación del supermuestreo por inteligencia artificial (DLSS), la cual es la tercera versión mayor, aunque ha habido grandes avances intermedios. Este DLSS 3 saca aún más provecho de los núcleos tensoriales de la arquitectura RTX para prácticamente cuadruplicar el rendimiento al tener el trazado de rayos activado.

Después de meses de rumores, esperas y consumos locos, la serie RTX 40 de NVIDIA ya es oficial. Tras una corta presentación, la compañía ha querido sacar pecho y justificar los elevados precios de las nuevas RTX 4090 y RTX 4080 con una serie de nuevas tecnologías que sacan partido de todo lo que ocultan dichas gráficas en su interior. Ya conocemos el DLSS, que sube de versión, pero RTX Remix es algo nuevo y necesitaban un golpe de efecto para llamar la atención. Ese golpe es Portal con RTX.

NVIDIA ha presentado las primeras RTX serie 40 y es hora de dar un repaso a sus características, o al menos las que ya ha publicado en su web. Salvo la RTX 4090, las RTX 4080 de 12 GB y 16 GB de VRAM realmente no son rompedoras respecto a la RTX 3090 Ti, y de hecho el modelo de 16 GB es solo un 50 % más potente que la RTX 3080 Ti, por lo que se quedará mucho más cerca de la RTX 3090 Ti.

NVIDIA ha anunciado finalmente las RTX 4080 y RTX 4090 que integran chips de arquitectura Ada Lovelace. Esta va a ser una noticia rápida porque no hay todavía demasiada información de todo lo anunciado en la GTC y por tanto me centraré en las generalidades anunciadas por la compañía. El chip Ada usado está fabricado con un proceso de 4 nm «optimizado» para NVIDIA por TSMC. Incluye 76 000 millones de transistores y en torno a 18 000 núcleos CUDA con una potencia de sombreado de 90 TFLOPS.

NVIDIA ha dejado atrás un mal segundo trimestre de 2022, aunque aun así ha conseguido mejorar un 3 % sus ingresos aunque ha experimentado un desplome del 33 % de sus ventas al sector jugón por el criptocrac. A pesar de ello, la compañía ya prepara el lanzamiento de las RTX 40 que podría ser tan pronto como una GTC (Conferencia de Tecnología de GPU) que tendrá lugar el 20 de septiembre. Hay varias GTC cada año, y no suele ser habitual que NVIDIA anuncie nuevas GeForce en ellas porque está más orientado al entorno empresarial, pero tampoco es algo que no se haya dado.

Cuando NVIDIA presentó el supermuestreo por aprendizaje profundo (DLSS) con las RTX 20 no había ningún juego que lo usara. Tres años después, ya hay en torno a cuarenta títulos que lo implementa, pero sobre todo los nuevos lanzamientos de las principales editoras. No es fácil de integrar en los juegos si se hace de nuevas, y por tanto el destino de DLSS depende de su integración en los motores de videojuegos generalistas. El de Epic Games, Unreal, tiene esa integración desde hace unas semanas y ahora Unity ha anunciado lo propio para su motor de juego que tiene su mismo nombre.

NVIDIA ha presentado nuevos modelos de tarjetas gráficas para el sector profesional englobadas en las RTX serie A. Son dos más que acompañarán a la anunciada hace unos meses RTX A6000 y otras cuatro específicas para movilidad. Utilizan chips GA104 y GA106 con distintas configuraciones de multiprocesadores de flujos de datos (SM) para no usar las mismas que las GeForce RTX. Es una táctica habitual para aprovechar al máximo todos los chips que se producen.

Los planes que tiene NVIDIA relacionados con los vehículos autónomos son ambiciosos, pero para ello se precisa de procesadores que estén a la altura de las necesidades de procesamiento de todos los sensores que debe incluir uno de estos coches. La serie DRIVE de la compañía es donde se engloban los procesadores que está creando, y el nuevo, Atlan, promete dar la potencia de un servidor de un centro de datos a un vehículo autónomo. Eso sí, no lo dará hasta al menos 2025 que sería cuando entraría en producción.