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ASML es el principal fabricante de maquinaria litográfica, o al menos en lo referente a los escáneres usados para la producción de las obleas. Luego hay mucha otra maquinaria que interviene en el proceso, pero comparativamente son equipos mucho más baratos. EUA está en una espiral de vetos a la exportación de maquinaria a China y a encontrado un aliado en el Gobierno de los Países Bajos ya que se le une a la última ronda de control de exportación de maquinaria.

YMTC es una empresa china que dispone de tecnología para crear chips de NAND 3D de alta calidad, sin nada que envidiar a los chips de Micron, SK Hynix o Samsung. Pero a los EUA en general y a Biden en particular les pica que China pueda hacerles sombra tecnológicamente hablando. Por eso Biden la añadió recientemente a la lista de empresas de comercio restringido. Ante la imposibilidad de vender sus chips a las compañías estadounidenses, una de sus principales fuentes de ingresos, ha empezado a despedir empleados.

EE. UU. ha entrado en una espiral de sanciones a la industria china de los semiconductores, pero es evidente que tarde o temprano terminará afectándole. Conseguirá que China sea antes de tiempo independiente en el terreno del desarrollo y producción de chips, pero también al liderato de EE. UU. en el sector. Así lo indica un informe de la Asociación de la Industria de los Semiconductores (SIA), una organización que engloba al 99 % de las compañías de chips del país norteamericano.

Estados Unidos de América está embarcada en una guerra comercial y tecnológica con China, iniciada por Trump y recrudecida por Biden, el cual quiere arrastrar al resto de países en sus guerras e intereses personales. Los dos que tiene en mente son Países Bajos y Japón, que son dos de las potencias en producción de maquinaria litográfica. En el caso del segundo, también de líquidos, fotolitos y otros productos necesarios para su funcionamiento. Según Bloomberg, estos países extenderían aún más el veto actual de EUA a sus productos.

Blizzard ha estado hablando en los últimos tiempos de la imposibilidad de llegar a un acuerdo para que sus juegos siguieran estando disponibles en China. Eso iba a desembocar irremediablemente en la cancelación de sus juegos en el gigante asiático, y así ha sido. Los juegos de Blizzard no están disponibles desde hoy, lo cual incluye desde HearthStone hasta el todavía muy popular World of Warcraft. Esto va a abrir una buena brecha en las cuentas de la compañía, lo cual se verá en el segundo trimestre del año.

Las tensiones geopolíticas generadas por la confrontación económica entre EE. UU. y China está haciendo que las compañías estadounidenses busquen nuevos proveedores fuera del país asiático. Algunas no pueden sustituir totalmente la producción que tienen allí o la adquisición de componente, pero Dell parece que tiene planes de desligarse completamente de los chips hechos en China a partir de 2024.

Loongson es el diseñador de CPU más avanzado que tiene China y cada vez tiene menos que envidiar a los procesadores occidentales. Aunque la compañía va a mantenerse operando mayormente en China por una serie de cuestiones geopolíticas, por ello tampoco tiene acceso a litografías avanzadas. Para solucionarlo, la compañía ha desarrollado el procesador 3D5000 que incluye un diseño basado en chíplets y que permite que el procesador alcance los 32 núcleos.

La situación en China en el terreno de la pandemia es peliaguda. La política de su Gobierno ha sido de tolerancia cero, obligando a cerrar ciudades enteras en los últimos meses, lo cual ha provocado grandes retrasos en la producción de electrónica y movimiento de mercancías. Pero las revueltas debido a esta política de covid cero, por encierros forzados y otras cosas que han ido ocurriendo en ellos, han hecho que Xi Jinping levante la mano. Ahora el covid está arrasando el país, pero sin confinamientos duros va a afectar a toda la producción del país, incluida la de la próxima electrónica.

Últimamente China y EE. UU. vuelven a dar un montón de titulares debido al recrudecimiento de las prohibiciones de exportación a China de productos con tecnología estadounidense. Eso ha hecho que se añadan una treintena más de empresas a la lista negra comercial estadounidense, pero también ha activado una prohibición a la británica Arm respecto a las patentes de sus núcleos de CPU más modernos.

EE. UU. lleva cuatro años en una guerra comercial y tecnológica con China en un intento de detener sus grandes avances. Las decisiones son bastante futiles porque han espoleado aún más la investigación tecnológica en China, haciéndola más autosuficiente que antes. A pesar de ello, EE. UU. va a añadir a una treintena más de empresas a la lista negra comercial del Departamento de Comercio con lo cual no podrán adquirir bienes y productos que incluyan tecnología desarrollada por EE. UU. o en las que se utilice tecnología estadounidense.