Análisis: ASUS Vivobook S14 S3407QA review en español (Snapdragon X)

Los portátiles con procesadores de arquitectura ARM estaban limitados a los Chromebook, pero la presentación el año pasado de los Snapdragon X de Qualcomm ha abierto la oportunidad de usarlos en Windows. Ya he probado alguno de estos equipos, que para el día a día son buenos procesadores, y en este análisis cubro uno con el más bajo de la gama de Qualcomm, el Vivobook S14 de ASUS con un Snapdragon X de ocho núcleos.

Inspección visual y características

El Vivobook S14 S3407QA es un modelo orientado a la parte media-baja del sector. No es un modelo económico porque ASUS no recorta tanto, pero se sitúa en un precio sobre los 850 euros por lo que tampoco es barato. Por su peso de 1.35 kg y tamaño comedido podría situarse en los ultraportátiles, que es el público para el que tendría más sentido: los que quieren algo pequeño, relativamente ligero pero con potencia para las tareas cotidianas o trabajo ligero.

Está fabricado en aluminio y con una buena calidad, de diseño sencillo y atractivo pero sin algo destacable. Incluye una pantalla IPS de 36.8 cm (14.5 in) con resolución QHD+ y con un refresco de 120 Hz. Es una buena pantalla para contenido sRGB, que es el que cubre. En la parte superior hay una cámara web HD con tapa de privacidad y sistema de desbloqueo facial con Windows Hello.

El procesador es un Snapdragon X (X1-26-100) de Qualcomm de ocho núcleos junto a una iGPU Adreno X1-45 de 1.7 TFLOPS de potencia. Es un procesador que solo se puede ver lastrado por los programas que no funcionen bien o no funcionen en la emulación x86 de la versión ARM de Windows 11 con que llega preinstalado.

Tiene también una NPU de 45 TOPS, que es de muy bajo consumo. Por eso es parte de la iniciativa Copilot+ de Microsoft, pero que por lo demás su uso va a ser transparente para el usuario, como lo lleva siendo desde hace una década las NPU de los procesadores de móviles.

El panel táctil es de buen tamaño y es capaz de interpretar gestos avanzados, como deslizar dos dedos en el lateral para subir y bajar el brillo de pantalla, por ejemplo. Es de calidad normal pero preciso, aunque la sensación física de los clics no sea la mejor, que además hace que el panel táctil descienda en torno a un milímetro y da una sensación rara, pero normal en este tipo de paneles táctiles.

El teclado incluye los habituales interruptores de tijera de buena sensación de tecleo, y este terreno está bien cubierto, aunque son interruptores algo más duros de lo que me gusta. Está retroiluminado en color blanco, y si bien no alcanza un brillo muy alto, es más que suficiente cuando hay poca luz ambiente o se está a oscuras.

En cuanto a los puertos y conexiones, en el lateral izquierdo hay dos USB 4 y un USB 3.0 y una toma de audio de 3.0. En el derecho hay un USB 3.0 así como las luces de encendido y de recarga si está enchufado. Y eso es todo. Se podría echar en falta un lector de tarjetas SD o un HDMI. La carga de la batería de 70 Wh de este equipo se puede hacer por cualquiera de los dos puertos USB 4, que además dan señal de vídeo. Si se tiene un monitor con USB-C, será una estupenda base para este portátil.

Rendimiento del procesador

El procesador incluido es un Snapdragon X de Qualcomm, y específicamente el X1-26-100. Es un procesador de arquitectura ARM con una parte de CPU de ocho núcleos Oryon que pueden funcionar hasta a 3 GHz, sin multihilo simultáneo. Es un procesador que está fabricado a 4 nm por TSMC, el cual también incluye una NPU de 45 TOPS para cosas transparentes para el usuario, así que tampoco importa mucho la NPU que lleven los procesadores.

Su consumo máximo es de 30 W sostenidos, por lo que no necesita prácticamente refrigeración para mantenerlo a unas temperaturas manejables. A pesar de ser una arquitectura distinta, la versión de Windows 11 que usa está hecha para procesadores ARM, y puede ejecutar cualquier aplicación x86 mediante una traducción automática del sistema operativo.

El problema fundamental es que esa traducción requiere bastante procesamiento, por lo que al final este Snapdragon X tiene bastante más rendimiento en los programas compilados para ARM que en los compilados para x86, siempre que hagan un uso intenso de procesador o funcionen a ráfagas. En aplicaciones normales no suele haber problema. Eso afecta al rendimiento de la mayoría de las pruebas siguientes, salvo Cinebench 2024 que he usado la versión para ARM. En esa se ve que tiene un rendimiento decente.

Cinebench R23

Cinebench 2024

AIDA64

7-ZIP

Corona 10

Blender 4.5

Rendimiento gráfico

Este procesador lleva una unidad gráfica integrada de tipo Adreno X1, que es un modelo bastante interesante aunque se ve lastrada por la parte de CPU. Es plenamente compatible con DirectX 11/12 y Vulkan, así que los juegos por este lado no van a necesitar traducción de primitivas por lo que no supondrán una carga adicional para la CPU. El problema es que aun así no todos los juegos ni programas gráficos funcionan con esta iGPU.

Esta unidad gráfica está compuesta de 768 sombreadores ya que se trata del modelo Adreno X1-85, pero con el turbo algo inferior, por lo que tiene una potencia de cómputo de 1.7 TFLOPS en lugar de los 2.1 TFLOPS de la incluida en algunos Snapdragon X Plus. Más o menos funciona a un turbo de 1050 MHz. El ancho de banda de memoria es de solo 135 GB/s, que para una GPU es bajo, aunque es decente para la potencia que tiene esta iGPU.

El rendimiento en los juegos que no estén compilados para ARM dependerá de lo mucho o poco que tiren de procesador. Además, pueden tardar mucho en cargar partidas dependiendo de lo que tengan que hacer con los sombreadores. Las instrucciones x86 hay que traducirlas a ARM y eso es trabajo de CPU, por lo que a mayor carga de CPU del juego más porcentaje del tiempo hay que dedicar a traducirlas. Las primitivas de la GPU no hay que traducirlas porque son de DX12, y la Adreno X1-45 es totalmente compatible con DX12. Por ese lado no hay pérdida de rendimiento.

A continuación recojo otros juegos que he probado con esta iGPU. El objetivo es jugarlos a FHD al menos a 30 f/s, activando el escalado de imagen si es necesario. En general, no lo consigue. Claramente no es la mejor iGPU para jugar que hay ahora mismo en el mercado, más los problemas que tienen todavía estos procesadores con muchos juegos. Juegos como Dota 2 sí los moverá a 50-60 f/s a FHD y calidad baja.

Pantalla

La pantalla del equipo es de tipo IPS, con una diagonal de 35.6 cm (14 in), una resolución de 2560 × 1600 píxeles (16:10), y con un refresco de 60 Hz. El brillo máximo no es muy alto, sobre los 400 nits, y cuenta con un acabado en mate con el que no dará problemas de reflejos en exteriores. Para hacer algunas mediciones he usado un ColorChecker Display Plus y algunos programas como DisplayCal, calibrado a unos 120 nits.

El panel cubre el 100 % de la escala de color sRGB con un volumen del 110 %, que es la principal a usar con esta pantalla porque solo se queda en el 70.8 % de la ADobe RGB y el 71.9 % de la DCI-P3. En general los colores, en sRGB, se ven perfectamente porque está bien calibrada de fábrica. Calibrarla mejora la precisión del color, por lo que se puede agradecer si se tiene un calibrador a mano. El contraste estático se sitúa sobre 1500:1.

En general la pantalla está bien, aunque no sea excelente porque el equipo es relativamente barato, o es un ultraportátil orientado a unos 800 euros. Para contenido multimedia, web, o trabajo relacionado, es una buena pantalla, capaz de reproducir colores de manera adecuada.

Almacenamiento

La SSD incluida en este equipo es una 2500 de Micron de 1 TB de tipo PCIe 4.0 ×4, de alto rendimiento. En CrystalDiskMark 9 alcanza una velocidad máxima de 6990/6035 MB/s de lectura/escritural secuencial, y 420/578 MB/s de aleatoria, con el peor caso siendo de 71/199 MB/s. Son valores buenos para el tipo de equipo que es, y la SSD será buena para cualquier tarea.

Autonomía

La batería de este portátil es de 70 Wh, que da para mucho teniendo en cuenta que el procesador gestiona muy bien el consumo en cada momento y que además en carga máxima el equipo consume sobre los 40-45 W sostenidos. El cargador incluido es de 65 W con un USB tipo C, de pequeño tamaño. Cuenta con carga rápida, así que en menos de una hora puede recargarse totalmente desde cero.

Para las tareas cotidianas como navegar, ver vídeos o escribir textos la autonomía se va a más de veinte horas, por lo que para simplemente trabajar servirá para una o dos jornadas sin recargarlo. Reproducir una película de dos horas desde internet no consumirá más de un 15 % de la batería. Dejando un vídeo de YouTube reproduciéndose continuamente, con alguna cosa más en segundo plano, lleva la autonomía a unas catorce o quince horas a un brillo sobre los 200 nits.

En tareas que exijan mucho de procesador… bueno, la autonomía no es tan buena. En este caso los 70 Wh de batería pueden volar en dos a tres horas según lo que se esté haciendo. Nada nuevo. Pero con lo que hay que quedarse es que la autonomía en el día a día, en cosas como navegar o ver vídeos, es de las más altas del sector gracias al procesador Snapdragon X que incluye.

Temperaturas, consumo y ruido

El interior de este equipo tiene un diseño normal, con una refrigeración de dos ventilador y un caloducto de cobre, que es suficiente para mantener las temperaturas a raya y el ruido bajo. Para el funcionamiento del ventilador hay cuatro opciones en el programa MyASUS de ASUS. Las pruebas anteriores las he hecho en el mayor velocidad.

El equipo tiene un consumo realmente bajo en carga completa en tareas de CPU, unos 35 W sostenidos, con algún pico que puede llegar a 50 W en ciertas situaciones. Así ocurre en la prueba de diez minutos de Cinebench R23, en la que en el perfil 'rendimiento' la CPU está a 80 ºC, con un ruido del equipo inferior a 40 dB por lo que no es nada molesto. En el 'normal' está a 70 ºC y el ruido cae a menos de 35 dB con 35 W sostenidos.

En el día a día el equipo es totalmente silencioso en los dos primeros modos se haga lo que se haga: navegar, ver vídeos, escribir. Incluso en el 'rendimiento' también lo es porque el procesador gestiona muy bien su frecuencia y realmente no llega a consumir mucho, sobre los 10-15 W.

Por último, en la zona del teclado se acumula bastante calor cuando el equipo está en carga completa: sobre los 38 ºC en la zona WASD y los 42 ºC en las teclas de función F1-F5. El equipo se puede usar sin problemas, pero se notará el calor. Ciertas partes de la zona inferior pueden alcanzar los 45 ºC.

Conclusión

El Vivobook S14 de ASUS con procesador Snapdragon X de Qualcomm es un modelo de ultraportátil de precio comedido que rendirá bien en el día a día. Windows para ARM todavía necesita pulir asperezas, porque hay aplicaciones que van mal o no funcionan, pero en general eso no suele ocurrir con los programas más usados, y mucho no tan usado.

El rendimiento gráfico es un tema aparte porque es más problema que haya juegos que no funcionen a pesar de ser una iGPU compatible con DX12. La traducción de instrucciones es solo de las x86 a ARM, que es por lo que las primitivas de los juegos se pueden ejecutar sin más en esta iGPU. Pero aun así, los juegos no adaptados a la arquitectura ARM pueden sufrir mucho en su rendimiento si tiran mucho de CPU. Se puede jugar con este procesador, pero va a ser complicado salirse de juegos antiguos o de deportes electrónicos.

Así que el rendimiento está bien para el propósito del equipo, que es un uso generalista, y la autonomía acompaña más que bien y es lo mejor que tiene. Además la pantalla está bien, con buena nitidez y calidad de color basada en sRGB. El diseño del equipo es bueno, pero sin nada destacable. Acompaña igualmente bien el sonido, y aunque el teclado incluye unos interruptores un poco más duros para mi gusto me ha resultado adecuado para escribir.

Obviamente Qualcomm tiene que mejorar en los controladores gráficos y en la arquitectura de los núcleos Oryon que incluye esta serie de procesadores, pero no ha cambiado mi opinión de que es un buen procesador si te ajustas al uso del equipo. Y en general, ASUS hace un buen trabajo en cuanto al Vivobook S14 como para conformar un portátil bueno para usuarios generalistas.