Da igual quién sea el inquilino de la Casa Blanca porque EUA tiene unos claros objetivos de Estado profundo y cualquiera de ellos los van a seguir. El principal es que China es el enemigo, y por tanto hay que limitar el comercio con ellos y, sobre todo, no hay que venderle procesadores que puedan usarse para entrar las IA para desarrollar armamento. Lo cual se ha demostrado fútil. Así que Trump, tras el veto de vender las aceleradoras recortadas de NVIDIA y AMD a China, ha dado marcha atrás pero ahora es China quien ha sugerido a sus compañías que ni las usen.

El acuerdo de Trump con NVIDIA y AMD es que paguen un 15 % de los ingresos de las ventas a China de aceleradoras como la H20, pero en los últimos tiempos han surgido noticias de que el Estado habría obligado a introducir puertas traseras en los chips y los controladores que usan. Lo cual fue negado tajantemente por el director ejecutivo de NVIDIA —la de AMD no ha dicho nada—, pero el mal ya está hecho.

Las sugerencias del Gobierno chino son básicamente un veto de facto, así que aquellas compañías que ya tengan aceleradoras H20 van a tener que dejar de usarlas, lo cual supondrá unas pérdidas hasta que puedan venderlas a terceros países. Al menos esto es lo que asegura Bloomberg, que no ha fallado demasiado en sus informaciones sobre este tema.

Por su parte, NVIDIA ha indicado que el Gobierno chino no usa los chips extranjeros para propósitos gubernamentales, por lo que el impacto no debería ser sustancial en sus cuentas… siempre que el resto de compañías sigan comprando sus H20. NVIDIA indica que estas aceleradoras no son para uso militar o gubernamental, pero como he dicho antes, ninguna empresa china va a arriesgarse a comprarlas tras la sugerencia de su Gobierno. Así que NVIDIA tendrá que revisar a la baja los ingresos del tercer trimestre y tendrá que ver dónde coloca una aceleradora creada específicamente para China.

Vía: Tom's Hardware.