La tendencia de este año es que los precios de la DRAM y la NAND van a subir tras año y medio en el que los principales fabricantes han tenido cuantiosas pérdidas, del orden de miles de millones de dólares cada trimestre. Pero en la recta final de 2024 la tendencia ha cambiado por el aumento de la demanda del sector consumo —móviles y portátiles principalmente— y de los centros de datos. Eso ha hecho que Samsung haya entrado nuevamente en positivo con su DRAM durante este primer trimestre del año, tras los fuertes recortes de producción y costes que llevó a cabo en la primera mitad de 2023.

Las compañías que se lanzaron a comprar DRAM durante 2023 han usado ya sus existencias y están comprando nuevos chips de DRAM a un precio que no está dejando de subir, aunque dentro de lo razonable para compensar que se desplomara entre un 30 % y un 50 % desde 2022 hasta mediados de 2023. De hecho en este trimestre se espera que los chips suban cerca de un 20 %, que se podría trasladar a los precios en el segundo trimestre.

Desde Corea del Sur también se afirma que Samsung habría entrado en positivo con su NAND, que siendo el principal productor del mundo serían también buenas noticias para la compañía. Los chips también subirán durante estre trimestre, por lo que los módulos de RAM y las SSD deberían subir durante el segundo trimestre del orden de un 10-20 %. Al menos si lo que dice esta gente de TrendForce es cierto, y no ocurre nada más.

Vía: WCCFTech.