Intel ha estado haciendo cambios importantes desde 2020 a su línea de producción debido a que ya se intuía los problemas de existencias a los que se iba a enfrentar. Una de sus fábricas para el encapsulado de chips está situada en Vietnam, que ha sido la usada para probar mejoras que finalmente le han permitido poner en circulación millos de unidades adicionales de sus procesadores. Los cambios se introdujeron en mayo de 2021 y le han permitido ingresar 2000 millones de dólares adicionales.

Los cambios se centran en el procesamiento del sustrato sobre el que se sitúa el chip en bruto y encima de él el dispersor térmico o tapa. La compañía introdujo situar en la propia fábrica los condensadores en ambos lados del sustrato. Hasta ahora solo los ponía en uno de los lados llevándose a otras instalaciones los sustratos para situar los condensadores en el otro. De esta forma se pueden procesar un 80 % más rápido, aunque ha precisado de destinar espacio y añadir maquinaria adicional a la fábrica de Vietnam.

Intel también destaca la inversión de 1500 millones de dólares que ha hecho en Vietnam, la mayor de una empresa estadounidense, y cuenta con 2800 empleados en el país. También ha indicado que desde que empezara a funcionar en 2007, la filial vietnamita de Intel ha procesado 3000 millones de procesadores con destino a los clientes globales de la compañía.

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Fuente: Intel.