Epic Games sufrió un duro revés al estimar el juez de su demanda contra Apple por prácticas anticompetitivas que no podría volver a la App Store. Aun así, el juez estimó que Apple tenía que abrir su tienda a otros sistemas de pago. A su vez, estimó que Apple no era un monopolio y por tanto no tenía que abrir iOS a tiendas de aplicaciones de terceros. Epic Games ha conseguido aunar fuerzas con la Casa Blanca y el poder judicial de 35 estados estadounidenses durante su apelación.

Todos consideran que el juez del caso hizo una interpretación libre de las leyes antimonopolio, lo cual va en contra de los principios básicos de las leyes ya que las leyes no deben ser interpretables. O dicen una cosa o dicen otra, pero no pueden decir dos cosas distintas en función del juez o crearía inseguridad jurídica. En este caso, estas instituciones estadounidenses han aportado su opinión no solicitada al juez a través de un amicus curiae. Es una práctica habitual en el derecho anglosajón y el juez puede estimar el amicus curiae o no.

Como parte de la ley Sherman antitrust, la Casa Blanca recuerda al juez de apelaciones que la sección uno dice que las compañías no pueden acordar entre ellas los precios para distorsionar la competencia —en este caso, la imposición de un contrato unilateral a los desarrolladores de aplicaciones—, y la sección dos que una compañía en una posición dominante no puede tomar acciones unilaterales diseñadas a crearse un monopolio. Lo que viene a decir es que el juez debería haberse posicionado al lado de Epic Games en más cuestiones legales de las que ha hecho, como por ejemplo que iOS está en una situación ventajosa y las acciones de Apple van en dirección a buscarle un monopolio con iOS o la App Store.

Vía: 9to5Mac.