Intel presentó hace unas semanas una serie de procesadores de 9.ª generación que no disponen de unidad gráfica integrada o, al menos, la tienen desactivada. Es la serie -F. Hasta ahora solo se habían presentado procesadores con el sufijo -K que indica que están desbloqueados para subirles frecuencias, y debido a que se mantiene (casi) la misma litografía a 14 nm y se aumenta el número de núcleos, Intel optó por usar material de soldadura para unir la pastilla o chip en bruto al dispersor térmico integrado (IHS).

Con ello ha conseguido mantener las temperaturas a raya, incluso por debajo de lo esperado, para que puedan ser procesadores para overclocking. Pero ahí se va a quedar el material de soldadura, porque uno de los procesadores sin unidad gráfica integrada nuevos es el Core i5-9400F, de mismos seis núcleos físicos sin multihilo que el Core i5-8400, con las frecuencias ligeramente subidas hasta 4.1 GHz de turbo frente a los 4 GHz —poca mejora—. Era un procesador con buenas temperaturas y rendimiento, por lo que, por si había dudas, llega con pasta térmica entre la pastilla y el IHS en lugar de con compuesto de soldadura. También se ve en las imágenes del destapado del i5-9400F que la pastilla es más pequeña que la usada en el Core i5-9600K, de misma cantidad de núcleos.

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Por último, el Core i5-9400F ya ha empezado a llegar al mercado, y lo hace con precios en PcComponentes que son más bajos que los del Core i5-8400. La diferencia no es excesiva, de 15 euros menos por un pelín más de potencia y sin unidad gráfica integrada —196 euros frente a 210 euros en el momento de escribir esto—, por lo que a aquellos que les sea de utilidad esa iGPU preferirán el Core i5-8400. Pero los que quieran ahorrar al máximo, el Core i5-9400F de momento llega más barato.

Vía: Guru3D.