Los altibajos del sector PC durante 2018 ha estado proporcionando grandes beneficios en unos sectores durante la primera mitad del año, como el de la RAM o las tarjetas gráficas, pero en el segundo la cosa no ha ido tan bien. Tampoco ayuda la guerra comercial entre EE. UU. y China, que ha afectado a los costes de desarrollo de ciertos productos, así como el de las importaciones a EE. UU. Pero tampoco ha ayudado que Intel esté pasando por problemas de producción de sus procesadores, y todo ello está afectando al sector de las placas base.

ASUS, Gigabyte, ASRock y MSI han visto caer sus ingresos y beneficios, con ASUS viendo caer sus beneficios un 43 % durante el tercer trimestre del año. Durante este trimestre seguirán teniendo dificultades para deshacerse de las existencias de placas base, lo que continuará en la primera mitad de 2019 ante la menor demanda de procesadores. En este caso, los consumidores verán caer algo los precios de las placas base, si bien los chipsets que usan de Intel también han estado subiendo algo de precio, por lo que la caída podría no ser especialmente pronunciada.

En cuanto a las tarjetas gráficas, la continua bajada de la demanda del sector de la criptominería, que actualmente está tocando fondo junto con el precio del bitcóin, también ha afectado mucho a los beneficios de los fabricantes. Altas existencias de chips gráficos, junto con una baja demanda de tarjetas gráficas en el sector PC y un alto precio de las nuevas tarjetas gráficas de Nvidia, las GeForce RTX, están haciendo que pasen por momentos difíciles, lo que podría llevarles a ingresar la mitad. También se habla de que Nvidia pudiera subir los precios de los chips gráficos ante una baja demanda de ellos para mantener la rentabilidad. Al menos no se espera que las GeForce RTX bajen mucho, si es que bajan, durante los primeros compases de 2019.

Vía: TechPowerUp.