Nvidia ha hablado en tiempos recientes sobre el gran éxito de ventas que ha tenido durante 2017. Aunque no es el grueso de su negocio, las ventas a los criptomineros son cada vez más importantes, y eso ha llevado a una escasez o altos precios de varios modelos de sus tarjetas gráficas de arquitectura Pascal. La intención de la compañía es aumentar la producción para cubrir la demanda, lo que se traduce en que los precios de sus tarjetas gráficas vuelvan a la normalidad. Sin embargo, la compañía no espera que eso ocurra hasta el tercer trimestre del año.

Hasta entonces, el precio de las tarjetas gráficas que usen chips gráficos de Nvidia seguirá en aumento, de acuerdo con uno de los vendedores de Massdrop, Brian Hutchins. El comentario llega después de una visita de uno de los representantes de Nvidia, que indica que «los precios seguirán en aumento al menos hasta el tercer trimestre antes de que se pueda ver alguna señal de bajada. Por tanto, el fin de esta situación no está a la vuelta de la esquina».

Aunque la criptominería es una de las responsables de los aumentos de los últimos tiempos, también está detrás de ello la escasez de memoria gráfica. Esto ha forzado subidas notables en el precio de los modelos que más GDDR llevan integrada, por lo que modelos de, por ejemplo, GTX 1060 de 6 GB que deberían estar en torno a los 269 euros están por 339 euros, y eso que Nvidia sigue solicitando el aumento de producción de chips a sus proveedores.

El gerente de Massdrop —una plataforma de venta al por mayor entre los usuarios de su comunidad— también habla de la venta de las tarjetas por encima de su PVPR (precio de venta al público recomendado), y lo hacen debido a que es lo que pueden conseguir de los distribuidores. «Mientras no pueda conseguir un trato mejor, las seguiré vendiendo por encima de su PVPR [...] Tampoco hay tarjetas gráficas en el mercado que se vendan cerca de su PVPR ahora mismo».