AMD ha ido retrasando la llegada de los procesadores con unidad gráfica integrada Raven Ridge, a las que denomina unidades de procesamiento acelerado (APU) al poder combinar para ciertas tareas la potencia de la CPU como de la GPU. En la práctica, funcionan como cualquier otro procesador con una GPU integrada, pero las Raven Ridge fusionan en un mismo chip la arquitectura Ryzen con la Vega, lo que los hace especialmente interesantes.

Los dos primeros procesadores ya están a la venta, o más bien han empezado a ser distribuidos por lo que podrían tardar unos días en llegar a todas las tiendas. Son dos las APU que llegan, y están orientadas para aquellos que quieren jugar a 720p o 1080p con calidad suficiente, pero tampoco sean unos jugones especialmente exigentes.

Ambos procesadores, Ryzen 3 2200G y Ryzen 5 2400G, incluyen cuatro núcleos físicos, el primero sin multihilo y el segundo con multihilo. Eso le da a este último ocho núcleos lógicos y, según AMD, «hasta un 21 % más de rendimiento del equipo que el Intel Core i5-8400», copiado de la nota de prensa que han enviado. Ese nivel de rendimiento no lo da un Ryzen 5 1500X, de precio similar ahora mismo, y sin GPU integrada. Aunque si te vas a la letra pequeña, muy pequeña, del correo recibido, indican que es en 3DMark FireStrike; dicho de otro modo, se refieren a rendimiento gráfico, del que indican por separado que tiene «hasta un 156% más de rendimiento de gráficos que el Intel Core i5-8400». Cortesía de la gente de mercadotecnia.

Serie 2000 de APU de AMD
Ryzen 5 2400GRyzen 3 2200G
Núcleos/hilos4/84/4
Frec. base3.6 GHz3.5 GHz
Frec. turbo3.9 GHz3.7 GHz
TDP65 W65 W
TDP configurable46-65 W46-65 W
Caché N2512 KB/núc.512 KB/núc.
Caché N34 MB4 MB
iGPUVega 11Vega 8
Unidades de cómputo11 CU8 CU
Procesadores de flujos de datos704 SP512 SP
Frec. base de GPU1250 MHz1100 MHz
Memoria utilizadaDDR4-2933DDR4-2933
Precio159 €99 €

La Ryzen 3 2200G cuesta 99 euros/dólares y la Ryzen 5 2400G vale 159 euros o 169 dólares. Para hacerlos aún una compra más interesante, incluyen una refrigeración Wraith Stealth, que generalmente es suficientemente silenciosa y hace un buen trabajo para enfriar los procesadores con los que se vende. Eso supone un ahorro adicional para el que opte por montarse un equipo económico para juegos, ya que las placas base con chipset A320 más baratas apenas cuestan 50 a 55 euros.

Las buenas noticias de estos procesadores es que están desbloqueados y permiten subir tanto su parte de GPU como de CPU. Además, utilizan memoria DDR4 de hasta 2933 MHz, más la mejora que permita el nuevo BIOS distribuido por los fabricantes con la nueva versión de microcódigo AGESA 1.1.0.1 que trae mejoras en este aspecto. Los que quieran subir el procesador, tendrán que recurrir a mejores refrigeraciones que la que viene de serie.

Rendimiento

El Ryzen 5 2400G dispone de 11 unidades de cómputo (CU) de arquitectura Vega, y eso son 704 sombreadores, funcionando a 1250 MHz. En las pruebas que se han realizado en Anandtech sobre ella apuntan a un rendimiento en torno al de una GT 1030, por lo que en este aspecto no hay ninguna pega que ponerle. Una GT 1030 tiene un coste entre 70 y 80 euros, y es suficiente para jugar a 1080p en calidad baja, o en calidad alta y buenos FPS en juegos de deportes electrónicos tipo Overwatch.

El Ryzen 3 2200G de ocho CU se queda en torno a un 15 a 20 % por debajo de este en rendimiento, con su frecuencia de 1100 MHz. En Grand Theft Auto V sí se queda bastante por detrás del Ryzen 5 2400G, pero teniendo un coste de 99 euros, creo que va a dar mucho de lo que hablar.

En cuanto a la potencia de la CPU, ciertamente no está cerca del de un Core i5-8400, porque eso son palabras mayores para un procesador de Intel de 200 euros o menos y que es el mejor que se puede comprar para juegos ahora mismo en el apartado precio-rendimiento. El i5-8400 extrae casi todo el rendimiento de incluso una GTX 1080 Ti. En este caso, los ocho núcleos lógicos del Ryzen 5 2400G se quedan algo por encima del rendimiento de un Ryzen 5 1400, que es un rendimiento más que aceptable.

En cuanto al consumo, el Ryzen 3 2200G se mantiene en unos 53 W —solo el procesador en sí— en plena carga, y el Ryzen 5 2400G llega a los 67 W.