Uber no ha tenido un buen año, y buena muestra de ello es que en Europa ha recibido un fuerte revés ya que la UE la considera una empresa de transporte de personas, y en EE. UU. fue denunciada por robo de tecnología por parte de Waymo. Esta última compañía es propiedad de Alphabet, que es la matriz de Google.
El juicio por robo de tecnología entre ambas compañías se ha visto aplazado. El comienzo del juicio tendría que haber sido el pasado cuatro de diciembre, pero el juez ha retrazado su comienzo debido a que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha decidido investigar el comportamiento de Uber, incluyendo la afirmación de un antiguo empleado de que la compañía habría empleado teléfonos móviles de prepago, así como otros dispositivos, para ocultar el uso de tecnologías robadas.
Por oro lado, también se indica en la carta del Departamento de Justicia en la que se comenta lo anterior, que los directores ejecutivos de Otto, Anthony Lewandosky (el exempleado de Google que habría robado la información de Waymo), y de Uber, Travis Kalanick, podrían haberse reunido en secreto durante mucho tiempo antes de la adquisición de Otto por parte de Uber.
La situación se le complica a Uber, a pesar de haber despedido a Lewandosky. Si el Departamento de Justicia encuentra indicios sólidos del robo de información, así como de conspiración, la compañía podría encontrarse contra las cuerdas en breve.
Vía: EnGadget.
