Una de las ventajas que tienen los procesadores Core X frente a los Ryzen Threadripper es la posibilidad de utilizar el conjunto de instrucciones AVX-512. Es una evolución de AVX/AVX2, pero que en este caso permite el uso de registros de 512 bits a la hora de ejecutar instrucciones en el procesador. Eso permite una ganancia de rendimiento adicional en ciertos tipos de cargas que si no se usara AVX, como por ejemplo la criptografía, la inteligencia artificial, el aprendizaje profundo, y el procesamiento de audio y vídeo, entre otros.

En última instancia, al usuario medio les sale más óptimo invertir en un Threadripper, pero AVX-512 es una característica que va a convertirse en más normal en los procesadores Intel. Según un documento de la compañía, va a añadir el conjunto de instrucciones AVX-512 a sus procesadores de consumo, empezando con los que se fabricarán a 10 nm: Cannon Lake y Ice Lake. Los primeros podría llegar a finales de 2018 y los segundo en 2019.

No todos los subconjuntos de AVX-512 van a estar disponibles en los Cannon Lake, ya que Intel reservará algunos para sus coprocesadores matemáticos Xeon Phi, aunque eso también irá cambiando con el tiempo. Además, a los Cannon Lake también llegarán nuevas instrucciones como la SHA-NI, que permitirá mejorar aún más la velocidad en procesamiento de algoritmos criptográficos, que a su vez ayudarán a mejorar la seguridad de los equipos.

Con estas nuevas instrucciones al alcance de cualquier usuario, los desarrolladores podrán aprovecharlas para implementar nuevas bibliotecas de, por ejemplo, codificación de vídeo más rápidas o incluso de renderizado. Será un empujón adicional de rendimiento que llegará a los procesadores de consumo de Intel, quizás en un intento de ampliar la ventaja sobre AMD ahora que con los Ryzen le está haciendo daño a sus ventas.

Vía: AnandTech.