El códec de vídeo más utilizado en la industria por ahora es el H.264, pero para reproducir contenido 4K UHD las compañías necesitan el códec H.265. La diferencia radica sobre todo en coste de las licencias, que hasta ahora las de H.265 eran bastante más caras. Pero Google tiene sus códecs gratuitos VP9 y el futuro VP10.

La palabra códec gratuito molestaba a HEVC Advance, y antes de tener problemas de que Netflix y Amazon (a la postre miembros con Google de la Alliance for Open Media), los actuales mayore susuarios de H.265, se fueran con la competencia, han bajado las licencias que antes era de hasta el 0,5 % de los ingresos de los servicios de retransmisión de vídeo. Ahora son menores, y eliminan los costes para las televisiones públicas o empresas sin ánimo de lucro.

Además, debido al soporte nativo en muchos procesadores (se tiene que realizar a nivel de hardware), es también un coste fijo por dispositivo vendido. Con H.265 se gana en calidad de imagen y en tamaño de archivos, aunque en el caso de Netflix también utiliza otros sistemas de compresión de imagen para ahorrar aún más ancho de banda en la retransmisión de contenido.

Vía: PC World.