Google estaba trabajando en una nueva actualización para Android Wear y ya la tenemos entre nosotros. El primer cambio al que apunta la compañía es que las aplicaciones dispondrán de un modo de siempre en uso para mantener la pantalla activada en todo momento. Esto permitirá a las aplicaciones cambiar los colores que tenga habitualmente por el monocromo.

Los colores solo se mostrarán mientras se esté usando activamente el reloj. Será útil para algunos casos de uso concretos, aunque por lo general no es idóneo debido al considerable aumento de consumo de batería que supondrá.

Otro cambio, bastante más importante, es que Android Wear añade soporte a conexiones Wi-Fi. Los que hayan usado un reloj de estos en su hogar se habrán dado cuenta tarde o temprano que si nos alejamos mucho del teléfono el reloj se vuelve poco útil porque pierde su conexión a internet. Este cambio pretende solventar ese pequeño (pero gran) problema. También servirá para localizar nuestro teléfono en caso de que no sepamos dónde lo hemos dejado.

Android Wear ahora añade nuevos gestos, como por ejemplo girar la muñeca para cambiar entre notificaciones en vez de deslizando los dedos por la pantalla. También, y muy importante, hay un nuevo lanzador de aplicaciones a un toque de distancia de la pantalla de inicio y no inexplicablemente difícil de acceder a el.

Por último, añaden soporte a la escritura de emojis directamente en la pantalla para enviarlas como respuesta rápidas en diversas aplicaciones. Supongo que se basa en los cambios al reconocimiento de escritura a mano alzada que ha introducido Google recientemente en otros productos.

La actualización llegará a los siete relojes Android Wear en el mercado durante las próximas semanas, comenzando con el LG Watch Urbane.