Apple salió perdedora en febrero de una demanda por infracción de patentes contra la compañía Smartflash. Las patentes tenían que ver con la gestión digital de derechos (DRM, del inglés de Digital Rights Management), almacenamiento de información y el sistema de pagos de las tiendas digitales. Total: 532,9 millones de dólares.

Ahora le ha salido a Apple un aliado inesperado, puesto que Samsung ha solicitado la revisión de varias de las patentes de Smartflash para comprobar si son válidas. Pero no lo hace por caridad, si no porque Samsung también ha sido demandado por Smartflash. La oficina de patentes tendrá que revisar la solicitud de la compañía que podrían declararse inválidas.

Este último punto es habitual en el sistema de patentes estadounidense. Más de uno os habréis formado la idea de que allí se pide patente por todo, y ciertamente así es. O más bien era, porque las leyes están cambiando para que las compañías obtengan las patentes al solicitarlas y no que se les conceda por el mero hecho de estar investigándolas aunque no las hayan solicitado.

Mientras tanto, Apple está dando largas a la hora de pagar los 532,9 millones de dólares a la compañía, a la espera de ver si alguna de las patentes de Smartflash es revocada.

Vía: PhoneArena.