Google presentó hace escasas semanas el nuevo buque insignia de Android. Para decepción de muchos, se trata de una phablet con pantalla de 5,9 pulgadas, y para decepción de aún más, tiene un precio de 649 euros. Pero eso no ha evitado que se haya puesto en precompra en EE.UU y se haya agotado en media hora.

Bien es cierto que sin tener datos de cuántos había a la venta, que se haya agotado rápido no implica nada. Si había de 20.000 unidades, es normal que se acabara rápido. Si había 1 millón (que lo dudo por que pocos teléfonos venden tanto en una precompra y todos llevan una manzana por detrás) indicaría un exitazo.

Sea como sea, el caso es que se nos avecina otro "pinchazo Nexus 4". Ese teléfono de Google marcó un antes y un después en Android, el momento en que de tener teléfonos que iban poco fluidos a ir bastante fluidos. De eso hace menos de dos años. Pero debido al hardware que presentó Google en el Nexus 4, su puesta a la venta en la Play Store estaba seguido minutos después por un "Fuera de stock". En mi opinión, más debido a que Google limitó el stock enormemente para no hacerle la competencia a los fabricantes que debían seguir confiando en Android para llevarle a donde está ahora mismo.

Esperemos que no vuelva a ocurrir pese a este primer indicativo de que así será, por que en este caso el precio que tiene el dispositivo puede estar vinculado a una producción todavía más limitada de unidades para ajustar costes del terminal. No creo que vaya a vender decenas de millones en el próximo año, pero sí que podría conseguir vender uno o dos millones e impulsar el sector de las phablets en general. Hay que tener en cuenta que ese sector movió 30 millones de dispositivos en 2013, y este 2014 podría superar ampliamente los 70 millones.

Vía: The Next Web.