Opera anunció hace unos meses que abandonaba el desarrollo de su primer motor de renderizado para navegador para abrazar WebKit, utilizado en las versiones actuales de Chrome y Safari. Aunque Google ha decidido escindirse del proyecto y crear uno propio, Blink, al que se ha sumado Opera, todavía no está disponible para el gran público y por tanto la empresa nórdica tiene que usar WebKit por el momento; más adelante lo cambiarán por Blink.

El primer navegador que sale de ellos es la remozada versión de Android, ya disponible para descargar desde Google Play. Parece que a algunos usuarios no les está gustando los cambios introducidos y han comenzado a votar negativamente a la aplicación. Los cambios en esta versión tienen relación con la interfaz, que sufre un rediseño, traen el dialer (acceso rápido) desde la versión de escritorio, buscar y navegar desde la misma barra, o ver las páginas que visitemos en pantalla completa.

Además añade un descubridor de contenido dentro de la aplicación (un feed de noticias), su compresor de páginas web para ahorrar tarifa de datos o funcionar más rápdio en zonas con poca cobertura (la solicitud de las webs se realiza a sus servidores, que te las envía comprimidas). La mayor pega que están poniendo los usuarios es que no incluye un reproductor de Flash (pero a estas alturas de la película, no creo que eso sea fundamental, además de que consume batería que da gusto).