Electronic Arts ha tenido una buena cantidad de fiascos en los últimos años y uno de los últimos ha sido Dragon Age: The Veilguard, desarrollado por BioWare. Así que como el sector de los videojuegos lleva un par de años muy tocado por la alta cantidad de bazofia de alto presupuesto que han producido, pues tampoco extrañará que BioWare haya pasado a despedir a más de una veintena de empleados tras el lanzamiento del juego.
Según ha indicado el estudio, la idea es centrarse en el desarrollo de la nueva entrega de Mass Effect, tras un Andromeda que llegó con problemas y la mala acogida dejó parte de la historia sin acabar. A mí me gustó el juego, más allá de que pudiera ser repetitivo o que le faltara profundidad en algunos apartados, pero en general la historia estaba bien y la jugabilidad también. No es un gran juego, pero se puede disfrutar.
El nuevo proyecto está liderado por varios implicados en la trilogía original, como Mike Gamble, Preston Watamaniuk, Derek Watts o Parrish Ley. Los despedidos han publicado sus lloros en Bluesky, así que se puede intuir de qué pie cojean, lo cual podrían ser buenas noticias para el próximo juego de Mass Effect. Entre los que están llorando en Bluesky están Trick Weekes, el jefe de guionistas de Veilguard, la productora del juego Jen Cheverie, y la diseñadora de jugabilidad Michelle Flamm, que son los principales culpables del desastre de Veilguard a nivel creativo y lo mínimo era despedirlos. Otros empleados han sido transferidos a otros estudios de EA, o se van a quedar en ellos tras un traslado que iba a ser temporal.
Vía: TechSpot.