La saga de Dragon Age ha sido bastante maltratada por parte de Electronic Arts a pesar de que la primera parte, Dragon Age: Origins, fue estupenda y un juego rolero imprescindible. A partir de la segunda parte cambiaron a un modo acción en tercera persona que, junto con una pésima jugabilidad, mandaron al traste lo que se había logrado con Origins. La tercera parte, Inquisition, con cambios más roleros y no estaba del todo mal, pero seguía sin ser Origins. Abordé el anuncio de Dragon Age 4 con suma indiferencia, pero la noticia de hoy hace que levante un poco la cabeza para ver qué ocurre con el juego.

Es bien sabido que Electronic Arts está imponiendo su concepto de conseguir pingües beneficios añadiendo todo tipo de microtransacciones y modos multijugador a sus juegos. Tras anunciar que dejaba el desarrollo de Anthem NEXT, BioWare se habría salido con la suya y habría conseguido que Dragon Age 4 se centrara el modo en solitario y que el multijugador sea eliminado del juego. Según como lo exponen en Bloomberg, habría sido tras una serie de discusiones entre el estudio y su matriz.

En parte habría favorecido el éxito de Jedi: Fallen Order, que es un juego de un jugador que ha tenido un gran éxito de ventas porque. Personalmente no me ha terminado de gustar por algunos problemas de jugabilidad —está pensado para mando y jugarlo con ratón y teclado me parece una tortura—, pero he de reconocer que el juego no está mal.

Dragon Age 4 simplemente está en una fase temprana-media de desarrollo y ni siquiera tiene fecha de lanzamiento por lo que tomar este tipo de decisiones ahora pueden mejorar el producto final. Eso también hace que tenga más esperanzas de que Mass Effect 4 siga la misma senda y elimine el multijugador que por ejemplo en Mass Effect: Andrómeda no pintaba nada que no fuera para engordar beneficios a base de microtransacciones.

Vía: Ars Technica.