Microsoft anunció hace unas semanas la compra de Activision Blizzard por 68 700 M$ y desde entonces hay mucho interés por saber si realmente saldrá adelante la operación o la Comisión Federal del Comercio (FTC) de EUA la echará atrás. Aunque tiene que ser aprobada también en otros países, siendo ambas compañías estadounidenses es la que más interesa saber si pasará el escrutinio. De momento la compañía empieza a hacer concesiones sin haber sido requeridos por el FTC, aunque son concesiones que sin duda se le iban a pedir.

Hay dos problemas importantes en esta adquisición: PlayStation y la Tienda Microsoft. Con esta adquisición la compañía sería la tercera por volumen de facturación en el sector de los videojuegos por detrás de Tencent y Sony. Aunque Sony no publica sus juegos en Xbox y Microsoft no los publica en PlayStation, este statu quo se ve roto al tener que pasar su forma de operar por el FTC. Para el caso, también tendrá que pasar la compra de Bungie por parte de Sony, que será la misma situación.

Microsoft ha prometido en boca del presidente de la compañía, Brad Smith, que Call of Duty y otros juegos populares de Activision Blizzard seguirán estando disponibles en PlayStation. Se puede pensar en juegos como Diablo IV que podrían haberse quedado fuera de la PS5. Con esto viene a establecer que la forma de operar de Activision Blizzard no variará, de la misma forma que Sony dijo que Bungie seguirá lanzando sus juegos en la Xbox. Aquí veo un patrón de convergencia Xbox-PlayStation-PC. Tiempo al tiempo.

En cuanto a la tienda de juegos, la compañía ha establecido algunos principios de funcionamiento que seguirá a partir de ahora. Al menos, hasta que los cambie. Entre ellos se encuentran puntos importantes, concesiones a la FTC, como que no obligará a los desarrolladores a usar el sistema de pagos de Microsoft dentro de los juegos, no los obligará a ofrecer ventajas a Microsoft a cambio de un posicionamiento preferente, tratará a todas las aplis por igual dentro de la tienda sin dar preferencia a sus propios juegos de ninguna forma, serán transparentes en las normas de promoción y publicidad dentro de la tienda, y no evitará que los desarrolladores hablen directamente con los clientes desde sus aplicaciones por temas relacionados con el negocio (precios, servicios ofertados). Se aplica tanto a juegos como otros tipos de aplicaciones.

Teniendo en cuenta el volumen de juegos que generará Microsoft si consigue adquirir Activision Blizzard, el tema de la tienda de juegos es casi la más importante. Lo de PlayStation sería un requisito pero no tan grave, y teniendo en cuenta lo que mueve Call of Duty en PlayStation dudo mucho que Microsoft se hubiera planteado siquiera cortar esa vía de ingresos. Por lo demás, me parecen medidas necesarias y oportunas para conseguir la aprobación en la FTC y en el resto de organismos del mundo que regulan la competencia.

Vía: EnGadget.