Hay algunas marcas de auriculares que son populares entre los jugones, como por ejemplo Astro, que Logitech G ha respetado tras comprarla. Es una marca que sabes bien lo que te va a ofrecer en sus productos, y en los Astro A20 X no son distintos. Aunque más que en el sonido, este modelo se centra en que se pueda usar en cualquier plataforma, y por eso incluye hasta un concentrador de conexiones inalámbricas que puede conectarse también con la Xbox.
Desembalado

Los Astro A20 X llegan en una caja negra en cuya portada se deja claro que sirven para cualquier plataforma, incluida las consolas Xbox. En la contraportada se abunda en sus prestaciones, como el micrófono retirable o el concentrador para usarlos en dos equipos a la vez. Al abrir la caja se verá un código QR que llevará a la página de asistencia de Logitech G con más información del producto.
Los auriculares están protegidos por una lámina de papel, siendo de diadema con suspensorio ajustable. Las copas son circumaurales cerradas, que es lo habitual en auriculares para juegos para reforzar los graves, y en el terreno de los graves no les he encontrado problemas. Son unos transductores de 40 mm de biocelulosa que cumplen a la perfección con el sonido.
En la caja también se incluye una caja en la que está el concentrador de conexiones USB para uso inalámbrico con dos equipos a la vez, el micrófono retirable, y los dos cables USB-C a USB-A para el concentrador o para recargarlos. También se incluye un manual de conformación legal, seguridad y garantía.
Empezando por el concentrador USB, es de pequeño tamaño, con el logo de Logitech G en la parte superior, y dos ledes en el frontal que parpadearán cuando se intente establecer la conexión con los auriculares o estarán fijos si ya se han emparejado. En la parte inferior hay un par de patas antideslizantes y un botón para sincronizar o cambiar entre las conexiones. En la posterior hay dos tomas USB-C para conectar el concentrador por cable a dos dispositivos distintos.
Mediante el concentrador es como mejor se escuchará el sonido, aunque luego también tengan Bluetooth 5.3. Con esta conexión no puede estar activa simultáneamente las inalámbricas del concentrador. Los puertos traseros tienen también un interruptor para asegurar la compatibilidad. El izquierdo, o puerto dos, se puede cambiar entre USB y Xbox, mientras que el derecho, o puerto uno, entre USB y PC. La posición USB es básicamente para PlayStation o la Switch, aunque tendría que funcionar también en la de PC con esas consolas.
Los auriculares recibidos para analizar son el modelo en negro, con el suspensorio en rojo, y se notan de buena calidad, aunque no se notan prémium. Dicho de otra forma, que destacan para su posición en el mercado. Buena parte de su PVPR de 215 euros es el concentrador USB. El diseño está bien, pero tampoco destaca, aunque Logitech lo fía a la inclusión de ARGB en las copas, si bien al portador eso le dará igual.
Las almohadillas son gruesas y bastante cómodas por mucho que se usen. No son los más ligeros del mercado, pero no superan los 300 g, por lo que se pueden llevar durante bastantes horas antes de que te empieces a cansar de llevarlos. Estas almohadillas recubiertas de tela cubren a la perfección las orejas, aislando un poco del exterior, lo justo. No se filtrará al sonido a un volumen moderado a bajo, pero no aíslan en ambientes ruidosos. Lo habitual.
En la copa izquiera está la toma del micrófono, que es retirable y flexible. Es fácil de ajustar para encontrar un punto en el que grabe bien, aunque se tiene que acercar bastante a la boca para que grabe bien al ser omnidireccional. En esta copa también está el interruptor de encendido, la toma USB-C para recargarlos o usasrlos por cable con un equipo.
Las almohadillas son retirables tirando de ellas, y de hecho es fácil también cambiar la batería de los auriculares, si en un futuro la autonomía empieza a flojear. En esta copa izquierda también hay un botón para silenciar el micrófono, una rueda de volumen —tiene un amplificador interno—, el cual mostrará un led en rojo, y un botón para cambiar entre conexión Bluetooth y la del receptor-concentrador USB.
En la copa derecha está el botón PlaySync para cambiar entre ambas conexiones del concentrador USB, y botones para cambiar el equilibrio entre chat y juego en la Xbox. Así que desde el punto de vista técnico son unos auriculares muy completos en cuanto a funcionalidades, pero de diseño normal. Como he dicho antes, me han parecido bastante cómodos de llegar durante horas. Generalmente uso mucho los auriculares por la noche para no molestar a nadie en la casa, y no me acuesto precisamente pronto.
Características

Los transductores de estos auriculares son de 40 mm hechos de biocelulosa, con una respuesta en frecuencia entre los 20 Hz y 20 000 Hz, con audio de 24 bits. Se puede cambiar entre las dos conexiones del concentrador USB con el botón PlaySync del auricular derecho.
Pesan 290 g, que no es mucho pero tampoco son especialmente ligeros, aunque no es como otros modelos para juegos que pesan 400 g y que se hacen insufribles de llevar tras solo un par de horas.
El micrófono es de tipo omnidireccional, con el volumen algo bajo por defecto, pero a cambio graba sin ruido como comentaré en un momento. Usa un muestreo a 48 kHz y una resolución de 16 bits. No está mal, pero hay micrófonos mejores ahora mismo en unos auriculares sobre los 150-200 euros.
| Astro A20 X de Logitech G | |
|---|---|
| Tipo | circumaurales cerrados |
| Peso | 290 g |
| Transductor | 40 mm biocelulosa |
| Frecuencia | 20 Hz a 20 000 Hz |
| Conexión | cable USB-C, Bluetooth 5.3, receptor USB |
| Micrófono | omnidireccional |
| - Frecuencia | 70 Hz a 20 000 Hz |
| - Resolución | 16 bits |
| - Muestreo | 48 kHz |
| Autonomía | hasta 90 h sin ARGB, hasta 40 h con ARGB estática |
| Comp. inalámbrica | PC, Xbox, PlayStation, cualquier dispositivo Bluetooth |
| Extras | ARGB en las copas, amplificador integrado, control de sonido de juego y chat por separado (Xbox) |
| PVPR | 180 dólares, 215 euros (sep. 2025) |
| PVP | 156 euros (nov. 2025) #ad #publi |
Sobre el sonido, por Bluetooth suenan raros y no recomendaría usarlos así salvo que fuera totalmente necesario. Al menos en macOS, y en Windows no es que suenen mucho mejor por esta conexión. Lo ideal es usarlos mediante la conexión inalámbrica que proporciona el concentrador USB.
Esa conexión es de buena calidad, aunque está a cierta distancia de auriculares de 150 a 200 euros para simplemente audio y no juegos. Aun así, suenan bastante bien, sobre todo cuando te acostumbras. La escena es amplia, pero las frecuencias medias se ven ligeramente perjudicadas por el refuerzo de los graves que tienen los transductores por defecto. Se nota en canciones más vocálicas, como las de pop, y algo en ciertos géneros de rock.
Eso sí, las frecuencias altas están generalmente bien representadas, con ciertos matices en la parte más alta, mientras que los graves suenan con fuerza. Se nota en canciones como Blood || Water de Grandson, en la que estos auriculares reproducen hasta los graves más profundos que tiene la canción. O sea, son auriculares para jugones, más centrados en ciertas frecuencias. Con algo de ecualización se puede corregir un poco el sonido para música, aunque como digo es un apartado que también cubren bien, pero para música tienen mucha competencia, y mejores alternativas en su punto de precio.
En cuanto a la grabación del micrófono, la calidad es normal, lejos de micrófonos dedicados de cien euros, pero en general se escucha bien. No hay ruidos extraños durante la grabación, y filtra suficientemente bien los sonidos oclusivos y ciertos explosivos de la voz. Aun así, la escena es estrecha, y por tanto se nota la voz algo enlatada, pero como digo libre de ruidos. Para el propósito que tienen los auriculares, es una buena grabación, pero no será como para hacer grabaciones de estudio, que no es su propósito.
Sobre la autonomía, es muy alta y es algo de lo más positivo, aunque tampoco es que sea un problema teniendo en cuenta que se pueden usar por el USB-C mientras se recargan. Logitech G indica que duran hasta 90 h sin iluminación, o hasta 40 h con el ARGB por defecto que es sin efectos. Suelo poner un volumen en torno al 25-30 % del máximo que permite Windows o macOS, y en este caso lo he puesto al cien por cien pero bajando el volumen del amplificador de los propios auriculares a un nivel similar, bajo pero sin serlo demasiado.
Me han durado más de una semana sin la iluminación ARGB, y con ella más bien tres o cuatro días. Así que este terreno también está bien cubierto. Obviamente si se potencian los graves o se sube más el volumen durarán menos, pero al menos tres días con la iluminación ARGB estática debería de aguantarle a cualquiera con un volumen al 50-70 %.
Programa de configuración

El programa de configuración es Hub como es habitual para los productos de Logitech G. Es una aplicación sencilla, disponible para Windows y macOS, pero que en esta ocasión hay poco que tocar sobre la calidad del audio o micrófono. Lo primero que se ve es una pestaña de 'Auriculares' que solo deja tocar la ecualización, a elegir entre varias preestablecidas o se puede crear una personalizada.
En este caso permite ajustar diez puntos, aunque uno de los parámetros a modificar, además de la ganancia o el factor Q (que se agradece), es la frecuencia en la que está el punto. Se puede modificar incluso en incrementos de un hercio, por lo que este sistema de ecualización es más interesante, aunque con los problemas habituales de la ecualización.
El mismo ajuste de ecualización se puede aplicar al micrófono (frecuencia, ganancia y factor Q), también en diez puntos hasta los 20 000 Hz. Se puede desactivar BlueVoice, que actúa de filtro y da en general bastantes buenos resultados como he comentado en el apartado anterior. También se pueden crear sonidos personalizados a asignar a teclas, y el control de la iluminación ARGB en pestañas separadas.
Una última pantalla de configuración permite ajustar el brillo de la iluminación, el tiempo de espera hasta que entren en suspensión para ahorrar batería, y otros como la desactivación de los avisos por voz de los auriculares. En general la aplicación es bastante sencilla, sin demasiadas cosas para ajustar, pero la ecualización es mejor de lo normal.
Conclusión

Los Astro A20 X son unos auriculares muy interesantes para los jugones debido a la calidad de sonido que tienen durante el juego. Tienen ligeramente potenciados los graves, lo cual casi siempre agradecen los jugadores, y en general la calidad de sonido es buena también para música, aunque no está en la línea de la calidad que ofrecen modelos de Bose o Sony de precio similar. Son algo peores en este terreno, pero siempre se puede intentar ecualizar para dejar el sonido al gusto del portador.
En última instancia son unos buenos auriculares, pero por el precio solo los sacarán partido aquellos que necesiten una doble conexión inalámbrica por USB de buena calidad, sobre todo si se tiene una Xbox. En otro caso, por su precio, hay modelos que ofrecerán mejor audio o micrófono, y sin ir a otras marcas, de la propia Logitech. Así que es para un nicho de mercado concreto.
Sea como sea, la escena de estos Astro A20 X es muy amplia, con buena representación de las frecuencias medias, mientras que las bajas están ligeramente potenciadas y suenan bien en juegos. La parte alta de las altas también tiene alguna ligera desviación, que se podrá notar en ciertos tipos de música que abunden en ellas, como ciertas canciones de rock, pero hay que saber muy bien qué se está buscando. Porque por lo general, los auriculares suenan muy bien también para música.
En cuando al micrófono, se escucha bien aunque ligeramente enlatado, con la voz cálida y se entiende bien, pero no habría estado de más un micrófono un poco mejor, sobre todo por su precio. Pero buena parte del coste se lo lleva el concentrador USB, que por otro lado es un buen añadido para los que tienen por ejemplo una consola y un PC en su escritorio. La calidad de audio por este concentrado es el mejor posible, porque la conexión Bluetooth suena extraña y sí que necesitaría ecualización.
La comodidad de uso está asegurada, aunque no permitan un gran ajuste. El suspensorio apenas ofrece dos posiciones por lado, lo cual dificultará un poco el posicionamiento o ajuste para algunas personas. Las copas son cómodas y cubren bien las orejas. El diseño es más bien normal, quizás mejorable para lo que cuestan, pero el conjunto está más que bien. Además que la autonomía es muy alta, incluso teniendo en cuenta el uso del amplificador integrado.
Puntuación
9.1
sobre 10