Razer tiene en el DeathAdder v3 Pro uno de sus mejores ratones, y ahora lo ha renovado en forma del DeathAdder v4 Pro para mejorarlo sin hacerle grandes cambios. Su diseño o prestaciones no varían, pero en esta ocasión la compañía ha añadido el receptor USB junto al ratón, que además recibe un lavado de cara y de prestaciones, siendo más práctico y que permite saber mejor si se está aprovechando o no los 8000 Hz de su conexión.
Videoanálisis

Desembalado

El DeathAdder v4 Pro de Razer llega en la habitual caja negra y verde en el que se indica que funciona de manera inalámbrica por receptor USB con un sondeo de hasta 8000 Hz. En la contraportada da más características del ratón, como su mínimo peso de 56 g, su autonomía de hasta 120 h, o curiosamente su ruedecilla que en este caso es óptica, lo cual resulta interesante.
Al abrirlo se puede ver una bandeja con el ratón y el receptor USB, que en esta ocasión es una semiesfera con el logo de Razer en la parte superior y antideslizante en la inferior. En la parte frontal hay tres ledes personalizables para indicar información de sondeo, potencia de la conexión y otros, con un código de colores específico. Ese código se indica en una tarjeta que acompaña al ratón, junto al manual de usuario, un manual de usuario, un cable USB-C a USB-A forrado de tela trenzada, y unas gomas antideslizantes para ponerle al ratón y mejorar el agarre.
El diseño del ratón es prácticamente igual que el del DeathAdder v3 Pro, por lo que me parece que no tengo nada malo que decir de ello. Es un diseño que se puede usar con los tres tipos de agarre por la altura que tiene, y en mi caso el que tengo es con la palma. Es más bien para manos medias tirando a grandes, pero incluso manos grandes de alguien de metro noventa como yo resulta cómodo.
De hecho no he podido dejar de usarlo debido a que el cambio más importante que tiene está en la parte inferior. Las almohadillas del DeathAdder v3 Pro eran minimalistas, por decirlo de una manera políticamente correcta. Ahora más que duplica la cantidad de almohadillas de teflón puro que tiene, y eso redunda en que desliza notablemente más suave. Es un cambio que me parece estupendo, ya que en su estética normal no hay casi cambios.
La ergonomía me parece muy buena porque el ratón tiene una cierta inclinación hacia el lado derecho lo cual permite que la muñeca esté en una posición un poco mejor. La posición de los dos botones del lateral izquierdo es correcta, con buen acceso a ellos, tienen una buena sensación de clic, y generean poco ruido al pulsarlos. Los botones ópticos principales hacen más ruido del que me gustaría, pero tampoco va a resultar molesto.
En esta ocasión la ruedecilla también es óptica, lo va a mejorar su precisión y además abunda en su vida útil porque no hay ningún mecanismo que se pueda obturar o dañar durante el uso. Además da una sensación al deslizarla que es bastante buena, como la de otros ratones de la compañía. Es un cambio bastante positivo teniendo en cuenta el precio del ratón.
Lo que se puede echar en falta en un ratón de 180 euros es que no sea Bluetooth, porque más allá de que tenga unas estupendas características técnicas, es bastante caro. Aunque eso habría añadido peso por la electrónica adicional, pero que pasara de 56 g como pesa a los 60-64 g tampoco habría pasado nada. Pero es cierto que la diferencia de peso entre los 64 g del v3 Pro y estos 56 g del v4 Pro los noto, aunque más noto las almohadillas a la hora de deslizarlo.
En la parte superior del ratón está el logo de Razer en un acabado brillante, que contrasta con el mate de toda su superficie. En la parte inferior hay un botón para encender el ratón que también sirve para cambiar el nivel de sensibilidad. Para la orientación de juegos de tiros y similares la cantidad de botones es suficiente, pero no habría estado mal que tuviera alguno más, o incluso clics laterales de la ruedecilla.
Características

El DeathAdder v4 Pro ratón tiene un tamaño bastante estándar tirando a grande, de 128 mm × 68 mm × 44 mm, por lo que está más orientado a los que tengan mano de tamaño medio a grande, sobre todo manos grandes. Su peso es de 56 g, como he comentado anteriormente, y se nota aún más ligero que el DA v3 Pro al moverlo por cualquier superficie.
Los interruptores de los botones principales son los ópticos de cuarta generación de Razer, lo cual veo ya como algo imprescindible. No es que se note una gran diferencia cuando cambias de un modelo con interruptores mecánicos a uno que tenga ópticos, pero al cambiar al revés sí que se nota bastante más. Este tipo de interruptores detectan todos y cada uno de los clics que se hagan al no tener un tiempo de rebote durante el cual no se detectan nuevos clics, así que para juegos de acción rápida o frenéticos, son imprescindibles.
| DeathAdder v4 Pro de Razer | |
|---|---|
| Dimensiones | 128 mm × 68 mm × 44 mm |
| Peso | 56 g |
| Conexión | cable, receptor USB |
| Mano | derecha |
| Agarres preferentes | palma, garra |
| Sensor | Focus Pro 45K |
| Sensibilidad | 45 000 PPP |
| Velocidad | 900 IPS |
| Aceleración | 85 G |
| Muestreo | 8000 Hz |
| Botones adicionales | dos en el lateral izquierdo |
| Autonomía máxima | 150 h (1000 Hz), 22 h (8000 Hz) |
| Memoria interna | un perfil |
| Cable | 1.8 m, forrado de tela trenzada, USB tipo C a USB tipo A |
| Extras | interruptores principales ópticos, ruedecilla óptica |
| PVPR | 170 dólares |
El sensor incluido es un Focus Pro 45K de Razer, mejor que el Focus Pro 30K anterior, el cual tiene una sensibilidad de 45 000 PPP, una velocidad de 900 IPS y una aceleración de 85 G. Son las mejores características de un sensor que esté en el mercado. El problema es que esas características solo las aprovecharán una minoría muy minoritaria de los jugones.
El cambio de sensor tampoco proporciona una mayor precisión porque sigue siendo del 99.8 % como en el Focus Pro 30K. Pero a lo que da acceso este Focus Pro 45K es a configurar en Synapse 4 la sensibilidad dinámica y herramienta de rotación, como indico en el apartado de configuración. Pero solo lo primero realmente va a llamar la atención, aunque ambas cosas ya estén presentes en el Viper v3 Pro.
Razer habla de una autonomía de unas 120 h de uso por el adaptador USB a 1000 Hz, y de unas 22 h si se usa con el muestreo a 8000 Hz a través del receptor USB. Esto es un aumento de en torno al 30 %, que siempre se agradecerá. Aun así, lo he usado principalmente con el sondeo a 1000 Hz porque si se usa con 8000 Hz hay que subir mucho la sensibilidad del ratón, y al final una por otra y la precisión y calidad de uso es similar, pero a 8000 Hz la autonomía vuelva.
Soy de juegos de estrategia y rol, así que tampoco es que sea un ratón orientado a mí. Pero cuando he jugado a algún DOOM o juegos de tiros con el ratón, tampoco he notado diferencia entre los 1000 Hz y los 8000 Hz. Supongo que habrá gente que realmente note la diferencia, pero no es mi caso.
Programa de configuración

El programa de configuración del ratón es el Synapse 4, y funciona sin problemas tanto en Windows como en macOS, así que lo he probado en este último. En la primera pestaña se puede configurar tanto las acciones de los botones del ratón, incluida la de la tecla HyperShift que tras apretarla da un segundo atajo a cada botón, como los ledes del receptor USB.
Como he dicho antes, el receptor incluye tres ledes, y estos se pueden asignar a mostrar con un código de colores que viene en una hoja suelta junto al manual, el nivel de batería, la calidad de la conexión con el ratón, la tasa de sondeo o el nivel de sensibilidad establecido. Lo veo bastante útil, y al finl tampoco es un sobrecoste. Son tres meros ledes que en un simple vistazo te muestran si tienes que cargar o no el ratón, o si tienes que acercar el receptor al ratón.
La siguiente pestaña sirve para configurar los niveles de sensibilidad entre los que se puede cambiar con algún atajo de ratón o teclado, la tasa de sondeo, o una herramienta para comparar la sensibilidad del ratón de Razer con el de otro para importar ese ajuste. La siguiente pestaña es la de la batería, para establecer el tiempo que tarda en entrar en reposo el ratón, o con qué nivel de batería debe entrar en el modo de bajo consumo.
A continuación va una pestaña para establecer la distancia de separación del ratón frente a la superficie, tras la cual se deja de rastrear su movimiento, con la opción de establecer una distancia de separación y contacto. Suelo usar los valores por defecto, pero hay gente competitiva que puede querer modifcarlo.
La última pestaña es para ajustar la traducción de la sensibilidad a movimiento. Normalmente se usa una línea recta, pero se puede establecer una curva personalizada o elegir entre 'natural' y 'salto'. La curva natural sí que me ha parecido mejor para usar el ratón, pero eso irá en los gustos de cada uno. Esto básicamente sirve para tener por ejemplo una baja sensibilidad con un movimiento lento del ratón y que si se pasa a moverlo más rápido la sensibilidad sea mayor. O sea, se puede tener la ventaja de tener una sensibilidad de 500 PPP y otra de 1600 PPP en una misma curva.
Por último, se puede indicar que se tiene tendencia a coger el ratón con este un poco girado, y para saberlo se indica un enlace que lleva a la web de Razer en el que se podrá comprobar si se usa el ratón girado o no, y en qué grado. Luego se puede ir a esta pestaña para poner lo que se indica en la web. En mi caso dice que lo uso sin girar, pero podría ser habitual que muchos lo usen ligeramente girado, 3 o 4 grados en una dirección u otra según si se es diestro o zurdo, u otras costumbres de agarre.
Como siempre, Razer proporciona todas las características de configuración necesarias para exprimir al máximo sus periféricos. Ahora que está Synapse nuevamente en macOS, no veo ninguna pega que ponerle, al menos para configurar el DeathAdder v4 Pro.
Conclusión

Puede que el DeathAdder v4 Pro no cambie estéticamente respecto al modelo anterior, pero introduce varios cambios notables que lo convierten en un mejor ratón que su modelo anterior. Los principales son el recorte de peso, un 12 % que lo deja en 56 g, que puede no parecer mucho pero junto con el aumento notable del tamaño de las almohadillas de teflón hacen que probablemente sea el ratón que mejor desliza de los que llevo probados hasta ahora.
La inclusión del receptor USB y que este tenga tres útiles ledes en el frontal es un gran añadido porque eso de tener que comprar el receptor de 8000 Hz por separado con el DeathAdder v3 Pro no es lo idóneo. Eso sí, el ratón cuesta 180 euros, por lo que lo lleva incluido en el precio. Como el PVPR del modelo anterior era de 160 euros, tampoco es un gran aumento, pero 180 euros por un ratón, que no tiene ni siquiera Bluetooth, me parece un precio elevado. Luego el PVP bajará, como ocurre siempre, pero de entrada es un gran ratón con un gran precio, y hay alternativas bastante más baratas que darán la misma sensación de uso.
El cambio del sensor a un Focus Pro 45K no es especialmente impresionante. Al final la precisión del ratón no varía según lo indicado por Razer respecto al Focus Pro 30K, y solo un puñado de personas podrán notar la diferencia. Eso sí, desde Synapse 4 se puede configurar plenamente, incluida la distancia de separación y contacto, el ángulo con que se usa, y más, por lo que Razer sigue teniendo ventaja en el terreno del software con estos ratones. Además, esa mejora de un 30 % de su autonomía es un buen añadido.
Así que el DeathAdder v4 Pro es probablemente el mejor ratón del mercado para juegos de tiros, pero solo unos pocos podrán sacarle el máximo provecho. Para el resto de personas, otras opciones de la propia Razer aportarán la misma sensación de uso a un precio bastante más reducido. Si se es el tipo de usuario al que está dirigido, no habrá mejor ratón en el mercado. Pero lo mejor es enemigo de lo bueno, y para el resto un buen ratón será suficiente.
Puntuación
9.5
sobre 10