Epic Games denunció hace unos años a Google y Apple por retirar Fortnite de sus tiendas de aplicaciones. El motivo de la retirada fue la introducción de un sistema de pago propio en lugar del que proporcionan Google y Apple en sus tiendas de aplicaciones. Esta batalla legal terminó regular en la demanda contra Apple, pero la de Google ha terminado felizmente para Epic Games porque el jurado del caso se ha posicionado de su lado de manera unánime.

Ambas demandas han sido fuente de una gran cantidad de información del funcionamiento interno de Google y Apple a la hora de gestionar sus tiendas de aplicaciones, que son parte de las pruebas usadas por el jurado para emitir su veredicto. Han estimado que Google ha mantenido un monopolio ilegal en la distribución de aplicaciones y en el pago dentro de las mismas en los dispositivos Android.

Como parte de sus conclusiones, el jurado ha estimado que los acuerdos con las editoras de videojuegos y con los fabricantes de dispositivos con Android para preinstalar las aplicaciones de Google son también anticompetitivos. Eso abarca los cientos de millones que Google habría pagado a empresas como Activision Blizzard, Nintendo, Ubisoft o Riot Games para que no crearan una tienda que compitiera con la Play Store, al menos según la demanda inicial de Epic Games. Pero tras las cuatro semanas de testimonios, parece que ha conseguido convencer al jurado.

El veredicto no es definitivo porque todavía queda todo el proceso de apelación que llevará años. Tampoco está claro del veredicto del jurado qué cambios va a tener que introducir Google en EUA para que deje de estar operando ilegalmente su tienda Google Play.