Las ventas de los productores de memoria NAND 3D usada en las unidades de estado sólido han tocado fondo. Las tres principales compañías (Samsung, SK Hynix y Micron) han recortado gastos y reducido notablemente su producción, por lo que las existencias globales de NAND se están vaciando. Así que una vez que estas compañías han estado bajando precios y han visto caer un 50 % sus ingresos durante 2023, ahora va a tocar el efecto rebote de subidas de precios. Al menos así lo cree TrendForce, aunque se basa en que las propias Samsung o SK Hynix han indicado que van a subir los precios.

Se espera que Samsung aumente el precio de su V-NAND un 10-20 % durante este trimestre, y que siga subiéndolo en torno al 20 % en los dos próximos trimestres. Eso llevará a aumentos de precios de las SSD, aunque las subidas del precio de la NAND se llevan a las SSD con un plazo de tres o cuatro meses. Así pues, a partir de enero, o más probablemente febrero, podrían empezar a subir notablemente el precio de las SSD. Samsung acapara en torno al 40 % de la producción mundial de NAND.

Hay otras cuestiones a considerar, como que la demanda del sector consumo no remonte y la de computación se estanque, pero las previsiones de los analistas es que la demanda aumente sustancialmente en ambos sectores. Hay otros que no lo ven más claro, por lo que por enésima vez el sector de la NAND, y también DRAM porque va relacionado, entrará en un tira y afloja de subidas y bajadas de precios hasta encontrar un punto de equilibrio. Esto lleva ocurriendo cada tres o cuatro años.

Vía: TechPowerUp.