Trust es una marca centrada en periféricos económicos por lo que es un sector especialmente competitivo. Entre sus ratones está el GXT 110 Felox, que por apenas 20 euros es un modelo inalámbrico con características sencillas. Está disponible en blanco y en negro, y tiene cosas interesantes para apelar a aquellos que no quieren gastarse 50 o 100 euros en uno de los mejores ratones del mercado, que será la mayoría de jugones.

Desembalado

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El GXT 110 Felox de Trust llega en una caja azul oscuro indicando claramente lo que se puede esperar de él, como que es inalámbrico, tiene un sensor con una sensibilidad de 4800 PPP y que la batería durará hasta 80 horas. La parte posterior abunda en estos detalles, pero siendo un ratón económico tampoco puede promocionar ninguna otra características relevante.

Nada más abrir la caja se puede ver el cable de conexión, que es de goma flexible de 1.8 m con un conector USB tipo A a USB tipo C. El ratón está en un encarte de cartón reciclado y protegido por una bolsa de papel reciclado. Al sacarlo también se puede ver un manual de uso y otro de conformación legal.

El ratón está hecho con la parte superior blanca y la inferior negra, aunque también está disponible todo en negro. En la parte inferior del ratón se puede ver una franja de plástico en la que se mostrará la iluminación ARGB, aunque también hay iluminación RGB en el logo del reposapalma.

Está hecho para diestros, con dos botones adicionales en el lado izquierdo y uno más en el superior que por defecto es para modificar la sensibilidad. En los laterales hay un patrón como rugosidad para mejorar el agarre que da buena sensación al tacto. En la parte frontal hay una toma USB tipo C.

No tiene un diseño precisamente ergonómico, sino uno para apelar a cierta audiencia jugona, que de entrada no me ha gustado al usarlo aunque tras los dos primeros días de estar usándolo he modificado ligeramente el agarre y cambió mi opinión sobre él. Al principio iba a ser un aspecto que pusiera como negativo, pero ahora no veo que lo sea.

En la parte inferior se puede ver el sensor óptico, un adaptador USB que se guarda en un hueco. También hay un interruptor con una posición para encender el ratón y otra adicional para activar la iluminación ARGB.

Características

Vídeo

El GXT 110 Felox tiene un tamaño de 131 mm × 70 mm × 42 mm con un peso 92 g. El sensor es óptico muy modesto, de 4800 PPP con una velocidad de 30 IPS y una aceleración de 10 G. Este tipo de sensores es bueno para el día a día y para jugar, con una alta precisión, aunque no sean los más precisos. Pero tampoco nadie necesita los sensores de 26 000 PPP para conseguir un 99.8 % de precisión en lugar de un 99.7 %.

Trust asegura que la autonomía de este ratón es de unas ochenta horas, aunque hay que entenderlo que será así sin la iluminación activada. En la práctica, con la iluminación va a durar tres o cuatro días de usarlo unas ocho horas, como mucho. La batería incluida es de 500 mAh, y tarda su tiempo en recargarse, aunque el ratón se puede usar con el cable conectado mientras se recarga. Como ahora mismo siempre se tiene algún cable USB tipo C sobre la mesa no va a ser un problema.

Este ratón no dispone de programa de configuración. El botón superior sirve para cambiar la sensibilidad entre los 800 PPP, 1600 PPP, 3200 PPP y 4800 PPP. Los dos botones laterales son para avanzar y retroceder. La posición de 800 PPP es la que mejor se ha adaptado a mi forma de usar los ratones, porque los suelo configurar a 1000 PPP a 1200 PPP como mucho, porque más de eso me resulta que se mueven excesivamente rápido.

GXT 110 Felox de Trust
Dimensiones131 mm × 70 mm × 42 mm
Peso92 g
Conexióncable, adaptador USB inalámbrico
Manoderecha
Agarres preferentesgarra, yemas, palma
Sensibilidad4800 PPP
Velocidad30 IPS
Aceleración10 G
Muestreo1000 Hz
Botones adicionalesdos en el lateral izquierdo, otro en la parte superior
Autonomía50 h
Memoria internaun perfil
ExtrasRGB en reposapalma, ARGB en la base
Cable1.8 m, goma, USB tipo C a USB tipo A
PVPR19.90 €

Inalámbrico, barato y con ARGB

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Los ratones económicos están en el punto de vista de muchos y es que realmente hoy en día no hace falta gastarse cien euros para obtener un buen ratón inalámbrico. Tampoco es habitual encontrarse buenos ratones de este tipo por 20 euros, pero solo tiene un par de puntos grises.

El primero es que la forma del Felox está pensada más para agarres tipo yema y garra, y no tanto con la palma, pero como he comentado antes, tras los dos primeros días de usarlo mi idea al respecto cambió. Al final sin darme cueta pasé a usarlo más bien con las yemas, a ratos dejando toda la palma en el ratón, y me ha parecido un ratón decente en el terreno del uso.

Otro aspecto mejorable es que, aunque como ratón inalámbrico funciona bien, tiene algún problema raro con la ruedecilla. Si la usas para desplazarte por una web y la dejas de usar durante un par de segundos, a continuación los primeros movimientos de la ruedecilla no los detecta y luego se desplazará mucho más lento de lo normal hasta que se consigue que el desplazamiento sea a la velocidad normal. Esto me ha exasperado al principio hasta que me he acostumbrado, pero puede ser un problema en juegos.

Los botones principales funcionan bien aunque necesitan un poquito más de fuerza de a la que estoy acostumbrado para activarse. El motivo es que es más fácil clicar por la parte frontal y más difícil hacia el medio, y estoy acostumbrado a clicar en los ratones más hacia el medio. Es otro cambio de hábito tras el cual lo he encontrado un ratón bastante bueno para jugar.

Los botones laterales están una buena posición decente y no me han molestado en ningún momento. Se puede dejar el pulgar por debajo de ellos y no se pulsarán nunca por error, o se puede dejar encima para pulsarlos rápidamente mientras se juega. La conexión inalámbrica es perfecta y no he tenido ningún problema de desconexiones teniendo el ratón a un metro y medio del PC, el cual se encuentra debajo de la mesa a la izquierda.

La sensación que me da el GXT 110 Felox tras probarlo es que es un modelo de características limitadas pero que funciona bastante bien. Su PVPR de veinte euros me parece bastante bueno para lo que ofrece, aunque como no soy de RGB quizás optaría por gastarme un poquito más en un ratón cableado con mejor sensor y capacidad de configuración. Pero para costar lo que cuesta, y teniendo en cuenta lo que ofrece, me parece un ratón bastante interesante si buscas un diseño más jugón e iluminación ARGB a precio de derribo.

Puntuación

7.5

sobre 10