Los fabricantes de unidades de estado sólido (SSD) no se olvidan de los modelos de 2.5 pulgadas con protocolo SATA3 a pesar de que los M.2 con protocolo PCIe están de moda. Al fin y al cabo, la mayoría de placas base solo pueden gestionar una o dos unidades PCIe, y por tanto el resto del almacenamiento, si se quiere que sea SSD, hay que recurrir a las conexiones SATA3.

Kingston ha puesto en el mercado la serie KC600 y apunta a la gama alta de este sector, en el que las mejores unidades compiten con las peores PCIe, por lo que siguen teniendo sentido para aquellos que buscan fiabilidad y un buen rendimiento mixto. Ahora solo toca ver si el modelo de 1 TB que nos ha hecho llegar la compañía, a quien le agradezco la colaboración, merece realmente la pena.

Serie KC600 de Kingston: características

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La serie KC600 se ha puesto en el mercado en dos formatos: la unidad en sí, y un kit de actualización. Este último es el que hemos recibido en la web, y por tanto tiene una buena cantidad de extras que a la postre me resultan terriblemente interesantes.

Por un lado, se incluye una bandeja adaptadora para afianzarlo en muchas cajas que no proporcionen una badenja para ella o se tenga el resto ya ocupadas. También sirve para ponerlo en bandejas de 3.5 pulgadas. Para usarlo en portátiles, se incluye un pequeño adaptador para ajustarlo al grosor de 9.5 mm en lugar del de 7 mm que tiene la SSD en sí. Y para los que quieran usarla como unidad externa, se proporciona una caja para conectarla por USB, incluyéndose para todos los casos los cables necesarios.

Como SSD suelta, su coste en el momento de escribir este análisis es de 143 euros (14.3 cts./GB) por el modelo de 1 TB, mientras que el kit de actualización le añade unos 25 euros más. En el caso del modelo de 256 GB, su precio es de 55 euros (2.14 cts./GB) y el del kit de 69 euros. Por último, el modelo de 512 GB cuesta unos 77 euros (15 cts./GB) y el kit unos 96 euros. Desde el punto de visto de capacidad-precio, el modelo de 512 GB es bastante interesante viendo lo que hay ya en el mercado.

Serie KC600 de Kingston
Característica KC600, 256 GB KC600, 512 GB KC600, 1 TB KC600, 2 TB
Lectura secuencial 550 MB/s 550 MB/s 550 MB/s 550 MB/s
Escritura secuencial 500 MB/s 500 MB/s 500 MB/s 500 MB/s
Lectura aleatoria 4 KB 90000 IOPS 90000 IOPS 90000 IOPS 90000 IOPS
Escritura aleatoria 4 KB 80000 IOPS 80000 IOPS 80000 IOPS 80000 IOPS
Durabilidad 150 TB 300 TB 600 TB 1200 TB
Precio 38.45 EUR 62.65 EUR

Estas SSD están compuestas por chips NAND 3D de 96 capas fabricada por Micron e implementa un controlador SM2259 de Silicon Motion con encriptación por hardware compatible con XTS-AES de 256 bits y TCG Opal 2.0. La durabilidad de esta combinación de NAND 3D y controlador hace que el modelo de 256 GB tenga unos buenos 150 TB y el de 1 TB tiene 600 TB. Hay un modelo adicional de 2 TB de capacidad que aparentemente aún no ha llegado al mercado. Incluye memoria DRAM y SLC para búfer y caché y mejorar el rendimiento global en un uso intenso.

La velocidad de estas unidades es de 550/500 MB/s de lectura/escritura secuencial en el modelo de 256 GB, mientras que el resto tiene una velocidad de escritura secuencial máxima de 520 MB/s. Todas tienen una velocidad máxima de lectura/escritura aleatoria de archivos de tamaño 4K y 90/80 kIO/s (miles de operaciones de entrada/salida por segundo).

Pruebas

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Las SSD actuales tienen una tendencia a proporcionar la misma experiencia de usuario en el día a día independientemente de su coste, y quiero decir con ello que la mayoría de las tareas que se tienen que hacer de leer y escribir ficheros en un uso normal se realiza en unos tiempos muy parecidos e indistinguibles para el usuario final. Una unidad SATA3 y una PCIe 3.0 ×4 no tendrán diferencias notables si se utilizan para jugar, arrancar el sistema operativo o tareas básicas en programas de diseño, ya que dependen más del procesador y tarjeta gráfica.

Aun así, pueden proporcionar velocidades muy distintas para otras tareas más específicas, como copia de archivos grandes o pequeños entre discos, descarga de múltiples archivos de internet mientras se usan otras varias aplicaciones, a la hora de tener activas varias máquinas virtuales, o para crear servidores web y de bases de datos. Por eso las pruebas de rendimiento que ejecuto son de dos tipos: unas para comprobar la velocidad máxima en varios tipos de carga específicos, y otras para datos de experiencia de usuario.

Las pruebas están realizadas en un PC con una placa base Z370, memoria DDR4-3200 y un Core i7-8700K, con Windows 10 Noviembre 2019.

Lectura/escritura aleatoria y secuencial

Las primeras pruebas son de lectura/escritura secuencial y aleatoria de archivos de 128 KB y 4 KB respectivamente, en el que se miden los resultados con colas de profundidad variables. Estas colas representan el número de operaciones que están siendo ejecutadas en un momento dado, y debido a la naturaleza de la memoria NAND, el rendimiento se beneficia de tener colas de mayor profundidad que potencia el paralelismo en las operaciones de entrada/salida (E/S).

En una prueba enlatada es habitual que la profundidad de cola sea de 32 para saturar el enlace E/S, pero en un uso más del día a día la profundidad de la cola suele ser sobre todo de 1, 2 y 4. En los siguientes datos se recogen los resultados de la media de estos tres tamaños de colas de profundidad. En el caso de las pruebas secuenciales, se realizan con bloques de 128 KB, y en las pruebas aleatorias son bloques de 4 KB. Se han dejado durante 3 minutos a cada cola de profundidad y prueba —en total cinco pruebas distintas— con IOMeter, tras acondicionar la SSD para conseguir un estado estable de rendimiento.

Lectura secuencial 128 KB (MB/s)
KC2000 (2 TB)
2348
960 EVO (500 GB)
2103
950 PRO (250 GB)
1875
Gammix S11 (480 GB)
1725
Gammix S5 (512 GB)
1410
KC600, 1 TB
523
850 EVO (1 TB)
506
UV500 (480 GB)
498
BX200 (480 GB)
472
MX300 (750 GB)
466
MX300 (2 TB)
452
Escritura secuencial 128 KB (MB/s)
KC2000 (2 TB)
1941
Gammix S11 (480 GB)
1450
Gammix S5 (512 GB)
927
960 EVO (500 GB)
869
950 PRO (250 GB)
805
850 EVO (1 TB)
482
KC600, 1 TB
476
MX300 (750 GB)
444
MX300 (2 TB)
430
UV500 (480 GB)
180
BX200 (480 GB)
99
Lectura aleatoria 4 KB (MB/s)
KC2000 (2 TB)
125
950 PRO (250 GB)
101
Gammix S11 (480 GB)
98
Gammix S5 (512 GB)
97
960 EVO (500 GB)
92
850 EVO (1 TB)
73.6
KC600, 1 TB
56
UV500 (480 GB)
49.2
MX300 (2 TB)
40
BX200 (480 GB)
37.2
MX300 (750 GB)
37.1
Escritura aleatoria 4 KB (MB/s)
Gammix S11 (480 GB)
185
KC2000 (2 TB)
172
960 EVO (500 GB)
167
950 PRO (250 GB)
158
KC600, 1 TB
118.3
850 EVO (1 TB)
105
Gammix S5 (512 GB)
81
UV500 (480 GB)
52.9
MX300 (750 GB)
46.5
BX200 (480 GB)
35.6
MX300 (2 TB)
27.3
Lectura-escritura mixta 128 KB (MB/s)
Gammix S5 (512 GB)
852
Gammix S11 (480 GB)
740
KC2000 (2 TB)
674
960 EVO (500 GB)
547
950 PRO (250 GB)
535
KC600, 1 TB
368.7
850 EVO (1 TB)
356
MX300 (750 GB)
333
MX300 (2 TB)
292
UV500 (480 GB)
252
BX200 (480 GB)
167

PCMark 8

Una prueba que demuestra que en un uso cotidiano las unidades de estado sólido proporcionan la misma sensación de rendimiento es la PCMark 8 de almacenamiento, que representa una serie de sesiones pregrabadas de uso real en el día a día para las SSD. La puntuación que aporta es un cálculo del tiempo que lleva reproducir la sesión usando de varias aplicaciones y juegos (World of Warcraft, Battlefield 3, Photoshop, After Effects, etc.).

PCMark (puntuación)
KC2000 (2 TB)
5082
950 PRO (250 GB)
5080
Gammix S11 (480 GB)
5060
850 EVO (1 TB)
4992
MX300 (750 GB)
4963
Ultra II (960 GB)
4959
UV500 (480 GB)
4945
KC600, 1 TB
4942
Gammix S5 (512 GB)
4939
SSD 840 EVO (1 TB)
4922
BX200 (480 GB)
4890
KC2000 (2 TB)
1

Dicha prueba de PCMark 8 también calcula la velocidad de transferencia de la SSD durante el tiempo que está activo, y por tanto refleja un ancho de banda de uso real de la unidad.

PCMark ancho de banda (MB/s)
KC2000 (2 TB)
638
950 PRO (250 GB)
540
Gammix S11 (480 GB)
468.5
850 EVO (1 TB)
293.1
Gammix S5 (512 GB)
270.2
Ultra II (960 GB)
246
MX300 (750 GB)
243
UV500 (480 GB)
240
KC600, 1 TB
230.5
SSD 840 EVO (1 TB)
221.3
BX200 (480 GB)
190

Otras pruebas

Por último, un repaso a un par de pruebas muy habituales que se utilizan a la hora de perfilar el rendimiento de una SSD como son CrystalDiskMark y ATTO.

Conclusión

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La serie KC600 está por méritos propios entre las mejores en formato de 2.5 pulgadas, y compite sin ningún problema con un referente como es la serie 860 EVO de Samsung. De hecho, en algunas situaciones la gana en velocidad, pero en general ambas están muy, muy a la par. El rendimiento en cualquier situación será excelente, y se podrá usar sin problemas para un uso intenso.

El kit de actualización sin duda resultará muy útil para una gran cantidad de usuarios, porque el extra que supone en su precio está en la línea de lo que aporta, y por tanto es igualmente buena compra. El puente USB-SATA3 implementado por la caja externa es de calidad y permitirá esquivar cierta parte de la penalización de rendimiento de lectura/escritura aleatoria, pero por ejemplo para usar esa unidad para almacenamiento puro es una opción excelente.

El precio inicial está en la línea de la serie 860 EVO, y apunta a usuarios que quieran lo mejor de lo mejor. Es una recién llegada, puesto que fue anunciada a finales de octubre, y por tanto su precio sin duda bajará en las próximas semanas, y cuanto más baje más competitiva será frente a la 860 EVO o la serie MX500 de Crucial. Eso lo podréis ir comprobando mirando periódicamente el artículo de mejores SSD. Sea como sea, incluso con el precio al que llega inicialmente es una buena compra.

Puntuación

8.5

sobre 10