La serie de auriculares Ayda de Trust tiene diversos modelos y aunque todos son económicos, unos lo son más que otros. Son unos microauriculares principalmente orientados a un uso en el trabajo, y los Ayda Max USB-ENC lo que ofrecen es un diseño de copas más grandes para mejorar el sonido, siendo circumaurales en lugar de supraurales. Se conectan por USB-C, lo cual es mejor de cara al sonido en cualquier PC sin necesidad de que tengan un chip de sonido bueno.
Desembalado

Los Ayda Max USB-ENC llegan en la habitual caja con colores blanco y azul que usa Trust en sus productos, indicando ese uso de un 65 % de plástico reciclado en los propios auriculares. Al abrir la caja se puede ver los auriculares en una bandeja de cartón junto a una guía de usuario, un libreto de conformación legal, y en el extremo del cable de conexión hay un adaptador USB-C a USB-A.
Esta versión de los Ayda es de tipo circumaurales, así que personalmente me gusta más que los supaurales. Cubre bien las orejas, aunque se queden apretándolas un poco porque no hay mucho espacio dentro de las copas para ellas. Aun así, me han resultado por lo general cómodos, aunque no como para llevarlos horas y horas puestos. No es el objetivo de estos auriculares, que como he dicho son de oficina y principalmente para hablar. En verano empezarán a dar un poco de calor si se llevan durante largo rato.
Las copas tienen cierto acolchado y un forrado de tela transpirable que no da mala sensación al tacto. Es un modelo de diadema con copas extensibles, sin posibilidad de ajustarlos más, aunque no he tenido problemas con la longitud que permiten. Hay que intentar una posición adecuada para que la música suene bien, y eso como siempre será con las copas echadas un poco hacia delante para que entre bien el sonido directamente al canal auditivo.
No tienen controles multimedia. En el auricular izquierdo hay un micrófono abatible, el cual si se abate del todo se silenciará la grabación de sonido. De esta copa también sale un cable de metro y medio forrado de plástico el cual termina en un conector USB-C, que poco a poco va relegando al USB-A a cosa del pasado. Todavía tardará unos pocos años, pero normativas como la de la Unión Europea obligan a adoptar el USB-C para todo.
Características

Los auriculares Ayda ENC Inalámbricos incluyen unos transductores de 40 mm hechos de neodimio con una respuesta en frecuencia entre los 20 Hz y los 20 000 Hz, con una sensibilidad de 90 dB, presión sonora de 95 dB y distorsión armónica inferior al 2 %, lo cual son unas características estándar. Son ligeros, con un peso de 167 g, lo cual abunda en que se puedan llevar tiempos prolongados sin molestar.
La calidad del audio es decente tirando a buena, y no hay auriculares en su punto de precio que vayan a proporcionar un sonido claramente mejor, sobre todo cuando su PVP se quede más cerca de los 30 euros en lugar del PVPR de 40 euros. Los graves se notan con cierta reforzamiento, e incluso los subgraves están bien representados, pero se notan ligeramente apagados, sobre todo en la parte alta, 200-400 Hz.
| Ayda Max de Trust | |
|---|---|
| Tipo | circumaurales cerrado |
| Peso | 167 g |
| Resp. frecuencia | 20 Hz y 20 000 Hz |
| Impedancia | 95 dB |
| Conexión | USB-C o USB-A |
| PVPR | 39.99 euros (julio 2025) |
Las frecuencias medias están bien representadas. Por eso la voz se nota un pelín apagada y alejada, pero se escucha perfectamente nítida, que es el propósito de estos auriculares —principalmente comunicación en oficinas—. Las frecuencias altas también están bien representadas y con ellas no he notado nada raro.
En cuanto al micrófono, la calidad de grabación es bastante buena. Aquí se nota la cancelación de ruido del micrófono (ENC), ya que elimina ciertos ruidos medianamente bien como los de teclear mientras se graba. Con lo único que hay que tener cuidado es con el posicionamiento, aunque el posible ruido de la respiración también lo elimina, pero no hace milagros si se respira muy fuerte.
Conclusión

Los Ayda Max USB con ENC son exactamente unos microauriculares para oficina, y es en donde destacan. La calidad de la grabación de sonido es bastante buena para lo poco que cuestan, aunque disten de tener el mejor micrófono del mercado. Pero teniendo en cuenta que su PVPR es de 40 euros no se puede pedir mucho más.
Al ser circumaurales me siento más cómodo con ellos que con otros modelos de la serie que son supraurales. Me molesta tener los auriculares sobre las orejeas, y estos lo evitan. El diseño de las copas es correcto, con tela transpirable de un tacto decente, aunque el terreno de los materiales no va a ser uno en el que destaquen. Son baratos, y lo llevan en el precio.
Pero aun así se nota que tienen una buena calidad de fabricación y que deberían de durar. No son los que permiten el mejor ajuste al usuario, pero tampoco son como para llevarlos horas y horas. Como he dicho anteriormente, son unos microauriculares para hablar y llevarlos en tiempo de oficina. Para ocio hay mejores que recortan en micrófono y mejoran en sonido.
Puntuación
7.8
sobre 10