In Win ha presentado la caja 925 con la que intenta dar un nuevo giro de tuerca al diseño de sus cajas más orientadas a ser muy vistosas, aunque en el proceso buena parte de ella queda abierta. Si bien desde cierto punto de vista está bien para favorecer la convección, por otro lado se llenará bastante más de polvo. Es además una torre de 17 kg y 570 mm × 392 mm × 608 mm (al. × an. × pr.), con un compartimento interno para fuente de alimentación y almacenamiento.
El exterior de la caja está hecho de aluminio anodizado de 4 mm de grosor con dos paneles laterales de cristal templado, con una estructura de acero y otros componentes de plástico. Dispone de iluminación ARGB en el logo frontal de la compañía, pudiéndose regular mediante los sistemas de RGB de placas base de diversos fabricantes.
Tiene espacio para instalar placas base E-ATX, ATX, micro-ATX y mini-ITX, para lo cual tiene ocho ranuras PCIe en horizontal así como dos más en vertical para ubicar en esa dirección la tarjeta gráfica. Su montaje se facilita con un soporte sobre el compartimento de la fuente, aunque no se incluye con la caja y tampoco el extensor PCIe.
Aunque la caja es una torre abierto con mucho espacio interior para refrigeración líquida personalizada, también tiene mucho espacio para ventiladores. Se pueden instalar en el frontal tres ventiladores de 120 mm o dos de 140 mm, tres de 120 mm en la parte superior y tres de 120 mm en la trasera.
En la zona de almacenamiento se pueden instalar cuatro unidades de 3.5 pulgadas y tres de 2.5 pulgadas. El panel de control incluye un USB 3.1 tipo, dos USB 3.0 y dos de audio de 3.5 mm. También se pueden instalar tarjetas gráficas de hasta 420 mm y disipadores de procesador de hasta 200 mm de altura.
El precio de esta caja es de 499 euros.
