En los últimos meses se ha normalizado el precio de la memoria de acceso aleatorio (RAM) tan indispensable como es para todas las computadoras, sean un móvil o un equipo de sobremesa. Ha ocurrido después de que desde finales de 2017 hasta finales de 2018 tuvieran precios absurdos, y durante 2019 no han hecho más que bajar de precio. Aparentemente seguirán bajando en los próximos meses según DRAMExchange.
Hay varios factores a tener en cuenta para ello. A diferencia del sector de la NAND, en el que parece que ya se ha igualado la oferta y la demanda y podrían repuntar hacia arriba los precios, en el de la DRAM los fabricantes siguen teniendo en sus almacenes una sobreproducción a la que no están dando salida a la velocidad adecuada por falta de demanda.
Además, los planes de expansión que iniciaron hace dos años les ha salido mal debido a la floja demanda del último año, y también hay que tener en cuenta que han mejorado sus procesos litográficos para aumentar la cantidad de DRAM que extraen de cada oblea.
Poniendo la mirada en módulos de memoria de 16 GB a 3000 MHz y 3200 MHz se puede ver que han caído a plomo, después estar cerca de los 200 euros en algunos casos. Ahora, estos están a 80 euros, y han tenido momentos de ofertas puntuales a 70 euros.
En algunos casos, una mayor demanda de módulos de ciertas velocidades, como los 3466 MHz a 3600 MHz, pueden no haber experimentado esa bajada de precio o incluso subir, sobre todo por la llegada de los procesadores Ryzen 3000 donde lo mejor coste-precio eran los 3600 y lo ideal según AMD eran los 3733 MHz. El precio de ambos tipos de módulos tiene fuerte fluctuaciones, y se nota más en unos países que en otros.
