Samsung está en plena campaña de control de daños por el puede ser su próximo gran desastre en el terreno de los teléfonos inteligentes después del móvil explosivo Galaxy Note 7 de hace unos años. Y la está llevando a cabo de la peor forma posible como ha sido solicitar a iFixit que retire su despiece del Galaxy Fold a través del socio que le proporcionó el smartphone para ese artículo.

En el análisis, iFixit mostraba varios puntos débiles del teléfono, como por ejemplo el espacio que se queda en la parte superior e inferior al doblarlo y por donde se pueden meter partículas que dañen la pantalla al desdoblarla o que provoque que aparezcan bultos. Aunque la construcción es buena, tiene fallos como este que pueden ser un grave problema.

iFixit ha indicado que no tenía obligación legal para retirar su artículo pero que lo ha retirado porque se lo ha pedido el socio que le ha proporcionado el móvil y quiere mantenerle como aliado en el sector de estudiar la reparabilidad de dispositivos.

El movimiento de Samsung no puede ser peor, porque lo único que va a conseguir es atraer más atención de la negativa hacia la compañía y este producto. La compañía está pendiente de indicar cuándo va a poner a la venta el dispositivo después de retrasar su lanzamiento, y cómo va a solucionar los problemas que se están presentando.

oaljptrxnf6v1xtk-980x551.jpg

Vía: Ars Technica.