Los rumores que han circulado internet durante el fin de semana sobre la posible adquisición de GitHub por parte de Microsoft han sido confirmados por la propia compañía. Satya Nadella sigue apostando por los desarrolladores e internet como el lugar al que dirigir la empresa, y de momento le está dando un buen resultado financiero. En los últimos días, el valor en bolsa de Microsoft ha vuelto a superar al de Google, lo que significa que Nadella al menos cuenta con el apoyo y confianza de los inversores.

Después de la compra de LinkedIn por más de 26 000 millones de dólares hace dos años, ahora la compra de GitHub le ha supuesto a la compañía un coste de 7500 M$. Es el centro neurálgico de los proyectos de código abierto de internet, en el que casi todas las compañías tienen sus repositorios Git. Eso incluye también a Google, que abandonó en 2014 su propia solución de gestión de repositorios Code por GitHub, aunque desde 2015 cuenta con Cloud Source como solución de gestión de repositorios Git.

Esta compra de GitHub por parte de Microsoft es muy importante para afianzar la dirección que ha tomado la compañía, siendo el mayor contribuidor a GiHub tras hacer pasar a mejor vida Codeplex, la solución de repositorios de Microsoft. «Microsoft ama Linux», como diría Nadella, y también los proyectos de código abierto, que choca frontalmente con la creencia de los directores ejecutivos que le precedieron.

Aunque, lo que no está claro, es qué va a hacer la compañía con GitHub. Se presupone que lo integrará de mayor o menor forma en Windows o en sus aplicaciones como el paquete ofimático Office, y que funcione como ahora hace con Dropbox: editar en Word y consolidar las actualizaciones desde el programa directamente en el proyecto relacionado de GitHub. Eso y muchas otras oportunidades de integración para hacer crecer a GitHub junto a Windows 10 y sus otros programas y servicios, como los diversos editores de código que tiene la compañía, o fomentar el desarrollo de aplicaciones universales de Windows (UWP).

Fuente: Microsoft. Vía: The Verge.