Como siempre suelo decir, la historia de Twitter es de lo más curiosa. Desde su fundación en 2007, la compañía no ha hecho más que perder dinero con la esperanza de conseguir en algún momento una fuente de ingresos estable. Tras diez años finalmente lo ha conseguido, ya que en el cuarto trimestre de 2017 ha hecho una cifra no demasiado alta de beneficios de 91 millones de dólares. Los ingresos de la compañía fueron de 731.6 M$, apenas un 2 % más con respecto al mismo periodo de 2016.

Teniendo en cuenta que los inversores esperaban unos ingresos de 686 M$, no pueden estar más contentos. Los ingresos por publicidad de la compañía fueron de 644 M$, y esto ha hecho que el valor de su acción suba de 25 dólares a 32 dólares, un 28 % con solo presentar un informe financiero. Aunque, eso sí, no todo es color de rosa ya que la compañía sigue teniendo problemas a la hora de atraer nuevos usuarios.

El número de usuarios activos mensuales se mantuvo en 330 millones con respecto al tercer trimestre del año, pero aumentó un 12 % con respecto al año anterior. Quizás tenga algo que ver con la ampliación a 280 caracteres la longitud posible de los tuits, o los hilos de conversación. Algunos usuarios opinan que ahora la red de microblogueo parece un bar con la gente soltando peroratas. Sea como sea, el valor de Twitter como compañía ha superado finalmente al de Snapchat, por lo que este 2018 va a ser crucial para el futuro de la compañía.

Vía: Tech Spot.