Con la inminente llegada de los procesadores Ryzen, que deberían estar a la venta a principios de marzo, surgen todo tipo de rumores. Uno de ellos apuntaba a que AMD proporcionaría unos drivers oficiales para Windows 7, haciendo así plenamente compatible la plataforma con una de las versiones más populares de Windows. AMD ha desmentido este punto y ha asegurado que no habrá controladores para Windows 7.

Esto no significa que no funcionen los procesadores o las placas base, ya que mantienen la arquitectua x86 y por tanto funcionarán. Lo que no permitirá al sistema operativo es sacar todo el rendimiento del procesador, así como las características especiales con que llegue. AMD asegura haber probado y validado el uso de los Ryzen con Windows 7, pero nada más.

De esta forma AMD se suma a la postura de Intel y Microsoft de proporcionar plena compatibilidad a sus nuevos procesadores bajo Windows 10, lo que incluye los Kaby Lake.

Vía: PC World.