El mundillo de las impresoras 3D ha dejado de ser un mercado para unos pocos con mucho dinero para ser algo accesible a todo el mundo. La propuesta de PocketMaker con su impresora PocketMaker 3D es que no ocupe mucho lugar en los hogares y sea fácil de utilizar por los principiantes. De momento han recurrido a Indiegogo en busca de la finanaciación necesaria, y llevan recaudados 36 000 dólares de los 70 000 dólares que se han puesto como meta.

También han pensado en cierta modularidad o simplicidad a la hora de cambiar ciertos componentes como el inyector, y utiliza cables de 1.75 mm para funcionar de tipo PLA o ABS. El tamaño de la impresora es un cubo de 80 mm de arista, y tiene un peso de 850 g. Es una impresora inalámbrica, y se puede manejar desde Android, iOS, Windows y OS X a través de aplicaciones dedicadas.

El precio de financiarla en Indiegogo es de 99 dólares, pero la versión comercial se vendería por 149 dólares. Parte del negocio también lo tienen centrado en la venta de repuestos, como los carretes de cable o los inyectores.

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Vía: Digital Trends.