Samsung es el principal fabricante de semiconductores del mundo, y aunque la fabricación en el sudeste asiático es lo más barato para las compañías, hay ciertos tipos de chips que es necesario fabricarlos en los países donde se van a usar. Es lo que le ha llevado a Samsung a anunciar sus planes para construir una fábrica en Texas, expandiendo la que ya dispone en Austin y que le costó a la compañía 4000 millones de dólares.

Entre los chips que se fabrican están diversos SoC de la gama Exynos para los teléfonos de la compañía, pero quizás seguramente también para que puedan ser utilizados por el gobierno de los EE. UU. La compañía podría contratar a otros 250 a 500 trabajadores para la expansión de la fábrica que se suman a los 3000 trabajadores con que ya cuenta en estas instalaciones, y estaría terminada en el verano de 2017. La compañía también dispone de un centro de I+D en Austin que emplea a otros 300 trabajadores, y Samsung lleva invertidos en la ciudad más de 16 000 M$ desde que llegara en 1997 a la ciudad.

samsungexterior_4499x2894

Vía: EnGadget.