La compañía inglesa ARM, dedicada a licenciar su arquitectura de bajo consumo para procesadores de dispositivos móviles, está dando cada vez más pasos para introducirse en el sector empresarial. Concretamente en el de los centros de datos, y para ello ha anunciado la mejora de su especificación ARMv8-A con una serie de extensiones escalables para cálculo de vectores.

La computación vectorial se centra en el cálculo de matrices y vectores. ARM ha añadido al conjunto de instrucciones (ISA) de la arquitectura de 64 bits ARMv8-A una serie de instrucciones para optimizar la ejecución de operaciones desde los 128 a los 2048 bits. Este conjunto de extensiones de vectores escalables (SVE), si se hace por hardware, permitiría agrupar varias operaciones de menor tamaño en una de hasta 2048 bits (según el procesador), o segmentar las operaciones de 2048 en varias menores para procesadores de menor capacidad. Todo sin tener que reescribir o recompilar el código de las aplicaciones.

Este acercamiento escalable en el procesamiento vectorial tiene como objetivo hacer a ARM una alternativa en la computación de alto rendimiento (HPC). ARM ya ha hecho pruebas con Fujitsu en este ámbito, y será el primero en licenciar este nuevo sistema escalar para una supercomputadora que llegará en 2020. Las pruebas preliminares apuntan a que se gana mucho rendimiento en ciertos conjuntos de datos sobre los que se ha probado SVE.

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Vía: AnandTech.