En el primer trimestre de año en Europa ha ganado terreno Windows Phone 8 a costa de (sobre todo) iOS. No contentos con el buen estado de forma de WP8, Telefónica y Microsofthan llegado a un acuerdo para promocionar de una manera más directa el sistema operativo móvil con la intención de romper el duopolio de Android e iOS, que actualmente copan el 90 por ciento del mercado.

El acuerdo llevará a promocionar estos smartphones WP8 en España, Reino Unido, Alemania, México, Brasil y Chile, donde la operadora tiene filiales de telefonía móvil (como por ejemplo Movistar en España). En principio los beneficios para el consumidor podría estar orientado a una mayor oferta de terminales en esos mercados, que deberían ir acompañados de una política de precios más ajustada y atractiva.

A partir de ahora encontraremos en España mucho antes los nuevos terminales WP8 que se vayan anunciando (como el HTC 8XT y ATIV S Neo presentado hoy por Microsoft), pero además como parte de los planes de Telefónica también están ofrecer diversos servicios de Microsoft a sus clientes, como Offices 365, Sharepoint, Skydrive o los de Xbox.

El resultado de esta unión está por ver, pero el actual mercado de los móviles en España es complicado. En mitad de la que nos está cayendo, cada día se dan de baja cientos de números de telefonía móvil, y quizás pretenda combatir la pérdida de clientes ofertando los móviles baratos de Nokia a un precio más competitivo. El Nokia Lumia 520 es un buen terminal que por su precio (unos 170 euros) se conforma en una alternativa de gran rendimiento en comparación a móviles Android de similar hardware.

Si quiere ganar combatir esa pérdida de cliente con Windows Phone 8, va a estar entretenido ver cómo sus chicos de marketing nos lo van a vender como mejor producto frente a Android e iOS.