Según un informe de Reuters, la producción de pantallas de 9.7 pulgadas por parte de Sharp para la línea de iPads de Apple habría sido reducida en beneficio de producir más pantallas del iPad mini, el nuevo éxito comercial de la compañía de Cupertino. La reducción habría comenzado a finales de 2012, coincidiendo con las primeras cifras de la campaña de Navidad.

Parte de ese descenso de producción vendría motivado por equilibrar la produccción posterior a la navideña común a todas las compañías, aunque se estima que se haya reducido en torno a un 40 por ciento, de 13 millones a 8 millones. Parte del ajuste de producción también podría venir dado a un cambio de tecnología en la fabricación de las pantallas (recordemos que Sharp es el productos de la tecnología de bajo consumo IGZO, que se espera hagan su irrupción este mismo año y que Sharp quiere que Apple utilice), o a una inminente llegada de nuevos iPads. Los datos de cómo han evolucionado las ventas de Apple en el último trimestre no se sabrán hasta la presentación de resultados de la compañía el próximo 23 de enero.

Ha sido tal el éxito del nuevo formato del iPad mini, 7.9 pulgadas, que la competencia se ha apresurado a sacar productos, alejándose de las habituales 7 pulgadas en Android. En los próximos meses saldrán un Samsung Galaxy Tab 8 y el Archos 80 Titanium, este último con la misma resolución de 1024 x 768 del iPad mini.

El menor precio del iPad mini (320 euros frente a los 500del iPad 4ª generación), y un tamaño más portable y ligero (pesa la mitad) parecen haber sido las razones del éxito de la nueva tableta de Apple.