Los mandos son un sector en el que es difícil que un modelo se ajuste a las necesidades y gustos de un usuario o distintos géneros de juegos, pero ciertos modelos consiguen encajar mejor en una mayor parte de los jugones. Flydigi consiguió bastante éxito con el Vader 4 Pro, y el nuevo Vader 5 Pro es aún mejor, siendo un modelo al que, vaya por adelantado, no le he podido poner pegas de funcionamiento. Tiene sus particularidades, como cualquier producto, pero como mando es realmente bueno y barato para lo que aporta.
Desembalado y características

El Vader 5 Pro llega en una discreta caja negra con poca información y la información justa sobre el producto. Al abrir la caja se puede ver el mando embutido en dos piezas de plástico y envuelto en una bolsa de plástico, que quizás no sea el mejor empaquetado para los tiempos que corren en el que se debería de reducir el uso de este material al mínimo en los empaquetados.
En una bolsa aparte se encuentra el cable USB-C a USB-A para uso cableado y recarga, siendo de buena calidad. También hay un manual del producto y un folleto sobre algunas de las características del mando que comentaré más adelante. En la propia bandeja de plástico está el receptor USB y dos levas de quita y pon, que es una de las mejoras respecto al Vader 4 Pro.
Nada más sacar el mando se nota que un poco más ligero de lo habitual. Son 289 g frente a los 345 g que pueda pesar el Xbox Elite que sigo usando a menudo, aunque normalmente use algún otro, como el mando básico de Xbox con el que está más alineado en peso y lo prefiero generalmente cuando voy a pasarme mucho tiempo jugando. Para ciertos juegos, llamadme loco pero prefiero el mayor peso del Xbox Elite. Esa solidez me gusta más para cuando necesito un control más fino.
El mando tiene un diseño prácticamente igual al mando de Xbox, o muchos otros, así que por mi parte lo considero un diseño ideal. Además la compañía ha mejorado en este modelo las agarraderas con rugosidades de goma para mejorar el agarre, y lo alinea mucho más con el Xbox Elite.
El peso, la sensación de uso y la posición de los controles me parecen ideales. En ese terreno me parece un mando soberbio, reforzado por la franja de iluminación ARGB que tiene en la parte inferior. Mide 102 mm × 154 mm × 65 mm mm, por lo que si no es exactamente el tamaño del Xbox Elite debe haber una mínima variación.
Si os preguntáis por qué lo comparo con el Xbox Elite, un mando de hace casi diez años, es porque en todo este tiempo no he encontrado un sustituto adecuado de él. Me sigue funcionando como el primer día, y no tiene deriva, o al menos no la nota en los juegos que disfruto en la Xbox o en PC. Generalmente son juegos en tercera persona, de tiros o aventuras, como Destiny, Cyberpunk 2077, Red Dead Redemption 2 o similares. Juegos que se disfrutan más con un mando y tranquilamente en el sofá, en sesiones cortas donde su peso me dé una mayor sensación de precisión, aunque me gusten más los de estrategia, rol —el de verdad—, etc., y al final no juegue ahora mismo tanto a los de tiros o aventuras.

Para mí, el Vader 5 Pro es mejor para sesiones largas en cualquier tipo de juego por el resto de características que tiene, que no son pocas, que voy a empezar a indicar. Empiezo con la conectividad, ya que funciona por Bluetooth, receptor USB o cable, conexiones entre las que se cambia con un interruptor en su parte posterior. Flydigi asegura que ha reducido a la mitad la latencia de la conexión en el Vader 5 Pro, pero tampoco es que estuviera mal la del Vader 4 Pro. Ahora es de unos 3 ms, que en un monitor de 144 Hz no se va a notar mal ni siquiera una latencia de 6 ms salvo que se sea muy tiquismiquis —y hay gente así que lo nota—.
El mando cuenta internamente con vibración mejorada, y puede llegar a ser muy fuerte. Todo se configura a través de Space Station 4.0, la aplicación de gestión de Flydigi para este mando, aunque para otros anteriores pueden ser otras versiones distintas de este software o ser un programa totalmente distinto. Lo comentaré en el siguiente apartado del análisis, porque la aplicación está bien, pero es bastante mejorable. No soy de usar la vibración en los mandos, porque me terminan molestando, pero se nota bien distribuida y progresiva.
La disposición de las palancas es asimétrica, y estas tienen mecanismos de efecto Hall, que es suficiente para la mayoría de usuarios, aunque otros podrían alegar que para ellos pueden no tener la precisión deseada. Eso es cuestión de gustos, pero no he notado nada extraño en su uso en los diez días que lo he probado. Lo interesante es que las palancas tienen unos aros girables para ajustar la tensión de movimiento de las palancas, que eso me ha parecido sensacional. Permite un ajuste entre 40 gf y 100 gf.
En el frontal está el logo de Flydigi en la parte superior que servirá para encender el mando. Están los dos botones adicionales de los mandos de Xbox (vista y menú), por aquello de que es un clon en formato de estos mandos. La botonera incluye cuatro botones con microinterruptores, de muy buena sensación de uso, aunque no me guste para todos los juegos porque son de actuación más rápida que los del Xbox Elite, por ejemplo.
Le acompaña otros dos (C y Z) un poco más abajo para juegos de lucha o emuladores, por ejemplo, que tienen una posición peor para pulsarlos rápido, pero tampoco es mala. Para el diseño que tiene, incluir seis botones en la botonera me parece estupendo y mejora su uso para una mayor variedad de juegos. Hace no mucho probé el Victrix Pro BFG Reloaded, que tiene un módulo de seis botones, que sería mejor mando para ello (discutible), pero con un precio que es más del doble de los 80-90 euros del Vader 5 Pro.
Sobre la cruceta, es de ocho direcciones, algo más elevada de lo habitual frente a la superficie del mando, y ha sido mejorada respecto al Vader 4 Pro. No me emociona especialmente la cruceta. Prefiero de cuatro direcciones, o que fuera intercambiable, pero una de ocho direcciones al final permite su uso en una mayor cantidad de géneros de videojuegos.
En la parte superior esta la toma USB-C, además de los habituales botones de acción frontales con cierta rugosidad, los dos gatillos, y dos botones adicionales que suelen ser muy útiles para macros o acciones específicas de más fácil acceso. Los gatillos tienen un diseño bastante bueno, siendo además gatillos progresivos, y en principio no hay que configurar nada para usarse así. En la parte posterior hay limitadores de recorrido con los que pasarán a funcionar como botones con microinterruptores de una sensación de uso similar a los de la botonera.
También se puede ver el interruptor para cambiar el modo de conexión, tres contactos para una estación de carga, y dos levas en buena ubicación y muy fácil acceso. No las he pulsado por equivocación, y no molestan. Además se pueden poner dos levas más para tener cuatro en total, lo cual aumenta aún más la versatilidad del mando. Las he probado para ver que funcionaran bien, pero realmente a lo que juego no le sacaría provecho. Las he probado en el F1 24 en el cual sí podrían ser útiles, pero no es el tipo de género que me gusta.
La batería es de 1000 mAh, un 25 % mayor que la del Vader 4 Pro, siendo decente porque puede aguantar en torno a 30 horas de uso, o menos según la configuración, la conexión usada, la potencia de la vibración, etc. Por último, el mando incluye giroscopio para los juegos compatibles, que muchos jugones lo agradecerán si están acostumbrados a ello.
Programa de configuración

Para configurar el Vader 5 Pro hay que descargar la aplicación Space Station 4.0 para Windows, que es la única compatible de las ofrecidas por Flydigi, aunque en su web no se indica directamente que es esta la que se usa. Hay versiones para iOS y Android, pero comparte características, aunque se me hace raro que no se pueda usar en macOS, o al menos si se puede utilizar en este sistema operativo no lo he conseguido. Se pueden guardar cuatro perfiles de configuración.
El diseño de la aplicación está bien, con una pantalla principal en la que se muestra el mando en la parte superior con los botones que tiene para configurarlos. En la parte inferior hay cinco pestañas para los distintos ajustes, y abarca bien lo que se puede configurar. Por ejemplo, en la primera pestaña está la luz o la vibración, esta última estando por defecto activa al 50 % de fuerza. Al cien por cien me parece muy agresivo
La siguiente permite configurar los botones, para lo cual solo hay que elegir uno de la parte superior y luego pulsar la tecla que se quiere asignarle. Funciona a la perfección con los ocho botones adicionales que aporta el mando, que está muy bien. Pueden asignarse macros, o incluso botones especiales como la rueda de ratón hacia arriba/abajo, o clic derecho/izquierdo del ratón.
Con la configuración de las palancas se puede cambiar entre dos algoritmos, rectangular y círculo, siendo el primero más idóneo para precisión y velocidad de reacción, y el segundo mejor direccionalidad que puede ser más apto para juegos FPS o de balón, entre otros. Está seleccionado el rectangular por defecto, y en los que he jugado de FPS (Cyberpunk 2077, Red Dead Redemption 2, Wukong) no he notado diferencia entre ambos modos, pero sí la he notado curiosamente en Two Point Museum, que no es el clásico ejemplo de juego para jugar con mando en PC.
La configuración también permite cambiar la curva de sensibilidad para conseguir que las palancas respondan antes o después a las acciones, o la zona activa. Por último, se pueden configurar los gatillos, tanto la vibración al pulsarlos, como la amplitud de la pulsación, etc. Los cambios a las palancas se pueden comprobar en un apartado de pruebas.
El programa funciona bien lo que tiene, pero se podrían ampliar las opciones. Hay algunos problemas con los que me he ido encontrado al probar el mando, pero nada molesto. Se puede pulir y quizás sea un punto más normal del mando, pero cubre bien la mayoría de aspectos que se podrían desear modificar en el mando.
Conclusión

Las críticas al Vader 4 Pro siempre han sido muy positivas desde que se puso a la venta hace año y medio, por lo que en este año la mirada estaba puesta en cómo Flydigi iba a mejorarlo. El Vader 5 Pro no es que sea una mejora en todos los apartados, pero sí que mejora en aspectos interesantes como la latencia de funcionamiento, o que dos de las levas son retirables. Pero lo importante es que me da una sensación de uso mejor que la que me da el Xbox Elite que sigo usando a pesar de los años que tiene.
He probado en este tiempo mandos caros, como el Raikiri Pro de ASUS o el Instinct Pro de SCUF, pero siempre fallan en algo que no me terminan de convencer para cambiar de mando del básico de la Xbox o del Xbox Elite —que me resulta pesado y lo uso solo en ciertas ocasiones—. Pero con el Vader 5 Pro, por el agarre que tiene y forma totalmente xboxera, es el mando que voy a usar a partir de ahora. Salvo, claro está, que no me sienta cómodo en el juego con los microinterruptores de la botonera, porque hay veces que echo de menos la retención que tienen los de los mandos de Microsoft.
Pero para la inmensa mayoría de usuarios el Vader 5 Pro va a ser un mando que encaje a las mil maravillas. Por prestaciones no le falta nada importante, y va más allá: palancas de fuerza regulable, gatillos progresivos con limitación que los convierte en microinterruptores de sensación agradable de uso, inalámbrico por Bluetooth o receptor USB además del uso por cable, iluminación ARGB discreta y que queda bien, cuatro levas, cuatro motores de vibración…
Obviamente las pegas vienen de que es un mando para PC, pero como la mayoría de los jugones están en esta plataforma, es poco problema. El real es que su disponibilidad fuera de China es más limitada, por lo que hay que recurrir a webs como Aliexpress para comprarlo. No es lo ideal, pero cuando un producto es bueno, ese inconveniente merecerá la pena. También de que el programa de configuración tiene sus problemillas de disponibilidad y funcionamiento. Pero más allá de eso, que son cuestiones que me parecen menores, el Vader 5 Pro es el mando de referencia para el sector, por precio y características.
Puntuación
8.8
sobre 10