No pillará a nadie por sorpresa si digo que Nintendo ha fracasado estrepitosamente con la Wii U y se ha quedado totalmente fuera de la lucha por la nueva generación de consolas. Pero Iwata ha apuntado a uno de los problemas de la Wii U y es la base en la que está sustentada su desarrollo, o dicho de otro modo la arquitectura hardware.

Con cada nueva consola que lanza Nintendo, la compañía crea una nueva arquitectura desde cero, e Iwata asegura que eso va a dejar de ser así en el próximo hardware que saquen. Ya sean consolas portátiles o para el salón, tendrán la misma arquitectura y por lo tanto los juegos serán plenamente compatibles entre dispositivos. Quizás sea un punto más a favor de los rumores sobre las nuevas consolas denominadas Fusion DS y Fusion Terminal.

Eso no significa que dejen totalmente de lado lo que ya han desarrollado con la Wii U, si no que lo integrarán en la nueva arquitectura por lo que se mantendría la compatibilidad con sistemas más antiguos. Según Iwata, esta aproximación también permite que el centrarse en el desarrollo de juegos para una consola no deje sin juegos a otra. Notablemente la cantidad de excelentes juegos que están en 3DS y que no se pueden disfrutar por ejemplo en el mando de la Wii U por no disponer de una arquitectura común lo cual es bastante absurdo (y económicamente poco rentable).