Análisis: NZXT H9 Flow RGB+ (2025) review en español

NZXT tenía en la H9 Flow una de las mejores semitorres del mercado, y su renovación es aún mejor. Es una caja de doble cámara, con amplio espacio para gestión de cableado e instalación de componentes, y es difícil ponerle pegas a una caja así. Además, tiene una versión que lo da todo hecho en el terreno de la ventilación interna, la H9 Flow RGB+ de este análisis, en la que será muy difícil que se acumule calor.

Videoanálisis

Análisis: NZXT H9 Flow RGB+ review

Desembalado

El empaquetado de la H9 Flow RGB+ de NZXT es el esperable con un par de piezas de poliestireno que fijan la caja, y otra inferior para dar mayor firmeza. Todas las características de la caja están puestas en uno de los laterales de la caja de cartón. Esta semitorre está metida en una bolsa de plástico, y en la parte inferior está el manual de usuario.

NZXT se ha alejado un poquito de su estilo rectangular de las cajas con este modelo, y realmente queda bien. El lateral izquierdo y el frontal tienen cristales templados, pero parte del frontal y lateral derecho es una cara más de los cinco que tiene la H9 Flow RGB+. En este lado van ventiladores, con una rejilla exterior, y la idea es orientar mejor el flujo de aire hacia la tarjeta gráfica.

La tapa superior se quita desenroscando un tornillo moleteado. Parte está agujereada para el paso del aire, y no he encontrado tras varios meses de usar la H7 Flow 2024 que haga un trabajo peor frente a si hubiera un filtro retirable detrás de estas rejillas. También está parcialmente agujereada la tapa derecha porque es la entrada de aire para la fuente de alimentación.

Los paneles laterales se quitan también desenroscando tornillos moleteados, que no es la forma que más me gusta para las cajas que uso porque trasteo mucho en su interior. Para la mayoría de usuarios será mayormente indiferente que vaya con tornillos o a presión porque no suelen tocar mucho el interior de sus equipos una vez está montado.

Esta semitorre mide 506 mm × 315 mm × 481 mm (al. × an. × pr.), lo cual es un volumen de 76.7 L, y pesa 13.4 kg, por lo que es bastante sólida pero no demasiado pesada teniendo en cuenta todos los ventiladores que trae preinstalados. No me parece excesivamente grande, pero es más grande que la semitorre típica. Es además en torno a un 20 % más grande que la H7 Flow, pero no se nota mucho. En su interior admite una placa base E-ATX, ATX, micro-ATX o mini-ITX, incluidos modelos con los conectores en placa hacia atrás —solo si son ATX o micro-ATX—.

Los ventiladores preinstalados son siete, repartidos en dos bloques F420 RGB Core y un F120 RGB Core de velocidad fija. No se puede decir que le falte a esta caja iluminación ARGB, porque además estos bloques de ventilación también incluyen franjas ARGB en sus laterales. Son buenos ventiladores, los cuales mueven mucho aire en el punto en que puede que se empiece a notar que hacen ruido, aunque de ello hablaré en el apartado de los pruebas.

El panel de conectores está en la parte inferior de la caja. Personalmente no me viene bien la posición porque tengo la caja en la parte inferior, pero entiendo que ha sido una decisión por el diseño del frontal. Se incluyen dos USB 3.0, un USB 3.2 —siempre son tipo C— y una toma de audio de 3.5 mm de cuatro polos.

En la parte trasera se puede ver la fuente de alimentación va a media altura en la cámara derecha —siempre relativo a mirar la caja desde el frontal—. También se pueden apreciar diversas posiciones en las que usar bridas para fijar cables, que siempre agradezco para tenerlos más recogidos.

En la parte inferior sí que hay una rejilla retirable de fijación magnética. En esta ocasión ambos lados de la caja están abiertas lo cual permite al menos mover mejor la caja de su sitio. El diseño de la H7 Flow 2024 hace que los laterales frontal, trasera y lateral derecho lleguen hasta el suelo, por lo que solo se puede meter la mano en el lateral izquierdo para levantarla, lo cual es poco práctico sobre todo si se mueve mucho como suelo hacer. Esta se puede mover bastante mejor. En la parte inferior también se pueden ver dos amplías gomas para que la caja no deslice bien pero también para no dejar marcas en donde se deje.

Diseño interior

El diseño interior de esta caja es de doble cámara, que es un diseño que me gusta más frente al compartimentado u otros que se suelen ver hoy en día en el mercado. Es un interior amplísimo, con una cámara principal para una placa base e ideal para ventilación tipo chimenea, y una cámara secundaria para la fuente de alimentación y almacenamiento.

Aunque llega con todos los ventiladores preinstalados, se pueden poner tres ventiladores de 120/140 mm en la parte inferior, otros tres en el lateral derecho, otros tres en la parte superior, y uno de 120 mm en la parte trasera. Este último se puede mover unos cinco centímetros hacia arriba o abajo para que se adapte mejor a la instalación.

Hay amplias zonas para el paso de cables tanto desde la derecha de la placa base como desde la parte inferior. En la parte trasera hay una especie de puerta en la que se pueden instalar cuartro unidades de 2.5 pulgadas. Se puede fijar con dos tornillos, o retirarla totalmente. Durante el montaje va a molestar.

También se puede ver el soporte en el que va la fuente de alimentación, que puede tener hasta 200 mm de largo. Por el diseño de la caja no hay problema a la hora de gestionar los conectores traseros de la fuente de alimentación, por lo que no hay que recurrir a diseños especiales de las fuentes que han lanzado otros fabricantes al mercado en los últimos años.

En la cámara principal hay una tira que va de arriba hasta abajo con el logo de NZXT en un lateral. Tiene una tapa ancha que se puede quitar y sustituir por una pequeña, movible, para dejar paso al cable ATX y tomas USB. La he aprovechado durante el montaje. la tapa grande está puesta en caso de que se use una placa base con conectores invertidos, en cuyo caso no habría que pasar a la cámara principal ningún cable y por tanto quedaría mucho más minimalista.

Debajo de donde va la fuente de alimentación se puede ver una caja para otras dos unidades de 2.5 pulgadas o 3.5 pulgadas. Se puede quitar totalmente desenroscando un tornillo moleteado. En esta caja va la cajita con extras, que son básicamente todos los tornillos habituales para montar un PC, una veintena de bridas blancas, varios velcros para el montaje y una tapa para la zona por la que se pasaría normalmente el cable ATX de alimentación y los cables USB del frontal.

Para simplificar aún más el montaje hay velcros en la parte izquierda de esta cámara secundaria, y aún más velcros en la parte superior. En la parte inferior se puede ver el concentrador de conexiones RGB que se incluye al que van conectados los ventiladores de la caja, pero necesita un PCIe de ocho pines para su alimentación y un cabezal USB 2.0 libre para su gestión desde el programa CAM de NZXT. En la parte inferior se pueden ver los habituales cables que proporciona un cabezal de panel frontal, otro de audio, uno de USB 3.0, y un último de USB 3.2.

Es una caja con amplísimo espacio interior para hacer un buen montaje, pero sobre todo su diseño está orientado a exponer el PC. Puede que haya mucho más espacio del que sería necesario para tener un buen flujo de aire y que se pudiera ver bien el interior, pero con tanto espacio se va a conseguir destacar todos los componentes del interior. Lo cual es a la vez algo positivo y algo negativo, dependiendo de la versión de esta caja que se compre. La H9 Flow 2025 y la H9 Flow RGB 2025 no tienen ventiladores en la parte inferior, por lo que tienen un gran vacío visual que pediría a gritos rellenar. Sin embargo, con este modelo H9 Flow RGB+, NZXT lo da todo hecho para maximizar la estética.

Montaje

El montaje de esta caja realmente no tiene ninguna complicación porque es muy espaciosa para cualquier componente. El equipo que he montado en esta H9 Flow RGB+ 2025 incluye una placa base Z690-P de ASUS, 32 GB (dos de 16 GB) de DDR5-6400 CL 34 de Kingston, un Core i7-12700K, una fuente RM850x de Corsair, dos unidades M.2 2280 PCIe 3.0 y 4.0, y una refrigeración Kraken Elite 420 RGB de NZXT, junto con una RTX 4090 de PNY. En carga completa, con toda la iluminación ARGB que lleva más la pantalla de la RLI y otros, puede ponerse en 600 W jugando a ciertos títulos, que es suficiente para probar el flujo de aire de la caja.

Creo que en esta ocasión no hay nada malo que decir sobre el montaje, y tampoco voy a decir nada que no haya dicho ya en el apartado anterior. La instalación de la placa base ATX se fija rápido porque el soporte central sobresale más y no necesita tornillo, que es una forma habitual en las cajas de facilitar su posicionamiento para atornillarlas.

La colocación de la fuente de alimentación se hace rápidamente. Es recomendable que sea modular en este tipo de cajas por no tener cables de más, pero es que en este modelo hay amplísimo espacio para dejarlos ocultos, aunque es posible que se vea parte de ellos y no quede especialmente bonito. Si es modular, mejor. Para mi montaje he quitado la caja de las unidades de 2.5/3.5 pulgadas, y la otra plancha para unidades de 2.5 pulgadas, lo cual facilita el montaje.

La instalación de la refrigeración líquida no entraña tampoco problemas. Hay tanto espacio que no da problemas ni siquiera el paso de cables porque hay mucho espacio entre el radiador y la placa base. Hasta se puede poner fácilmente el cable EPS de alimentación de la placa base en caso de que se haya olvidado ponerlo antes de instalar el radiador. Y ese radiador puede ser del grosor que sea, porque hay mucho espacio para él, incluso de más de 70 mm teniendo en cuenta los ventiladores que incluya, lo cual da margen para usar ventiladores de 30 mm de alto rendimiento en la refrigeración líquida integrada que se use.

Puesto que los ventiladores ya van a un concentrador, solo hay que conectar su PCIe de ocho pines y el cabezal USB 2.0 en la placa base. Luego se ponen el resto de conectores del panel frontal, y esa parte se queda lista. Para la tarjeta gráfica es muy recomendable, o casi imprescindible, que si es un modelo con conector de alimentación de dieciséis pines se use una fuente con un cable 12V-2x6 para evitar que quede visualmente mal un adaptador de tres o cuatro PCIe de ocho pines a este de dieciséis pines. Quedaría colgando y rompería el propósito de esta caja.

Mi opinión resumida de esta semitorre es que es para tener un PC de expositor. Lo que prima es la estética aunque en el apartado del movimiento de aire, como diré en el siguiente apartado, sea también muy buena. Hay que intentar comprar todos los componentes de manera que conjunten con el color de la caja, que además en blanco se vende también en negro. Pero el negro favorece la iluminación ARGB, y sería la verisón más interesante para el propósito de NZXT con esta caja.

Pruebas

Para las pruebas suelo hacer cambios en la UEFI de la placa base para ajustar los ventiladores, pero en esta ocasión se pueden gestionar todos desde el programa CAM de NZXT. Los bloques F420 Core RGB los he puesto en el modo 'silencioso' de CAM, y eso hace que se queden normalmente sobre las 670 r. p. m., y no se les escucha. El trasero está a mayor velocidad, unas 1050 r. p. m., con el mismo perfil 'silencioso', el cual depende de la temperatura del líquido refrigerante de la RLI.

La temperatura de la CPU en Cinebench R23 en carga durante la prueba de media hora se estabiliza a unos 69 ºC (∆43 ºC), con algún pico a 71 ºC, y con una temperatura ambiente de unos 26 ºC. El ruido que sale del equipo es mínimo, de unos 29 dB medidos a un metro de distancia del lateral de la caja. Medido más cerca, a unos 30 cm, se sitúa sobre los 30.5 dB, así que si se deja el equipo sobre la mesa el ruido será muy bajo pero se notará que están moviendo aire diez ventiladores, más el ruido que pueda hacer la bomba de agua. El consumo del procesador es de 165 W, y el equipo completo está consumiendo unos 280 W medidos en el enchufe.

En reposo el procesador está sobre los 30 ºC (∆4 ºC), y en tareas ligeras como usando un navegador se mueve entre los 35 ºC y 45 ºC (∆4-14 ºC), siempre teniendo en cuenta que lo tengo puesto en el perfil silencioso y que los ventiladores apenas funcionan a 670 r. p m. Reproduciendo vídeo se queda en torno a los 30 ºC, pero en general tiene tendencia a irse a la posición de reposo de 28 ºC, así que este la caja no plantea problemas de aire bloqueado ni otros por su despejadísimo diseño interior.

Haciendo un OC en la UEFI que pone el procesador a un consumo de 215 W, en Cinebench R23 se alcanzan los 86 ºC (∆60 ºC), pero con mismo mínimo ruido de unos 29 dB. Los ventiladores en CAM están en el perfil silencioso, que depende por defecto de la temperatura de la RLI, pero apenas suben su velocidad a las 710 r. p. m. y no se nota que suba el ruido. Tampoco se notará prácticamente si se tiene encima de la mesa, aunque se situará más cerca de los 31 dB a 30 cm de distancia.

Así que como los ventiladores están a un nivel muy bajo y la bomba de agua también, para este consumo de procesador de 215 W hay amplísimo margen para mejorar las temperaturas a costa de ruido. Pero 86 ºC para un 12700K es una temperatura dentro de lo razonable, y a distancia de la limitación térmica del procesador que se sitúa en los 100 ºC. No habría problema en refrigerar unos Core Ultra 9 285K o Core i9-14900K que son procesadores de 250 W de consumo en carga completa. Eso sí, a costa de más ruido, pero tampoco mucho más.

Jugando a Cyberpunk 2077 la situación de las temperaturas obviamente es bastante mejor. La CPU se mueve entre los 52-68 ºC (∆26-42 ºC) según el momento, y la GPU se queda en unos 65-68 ºC (∆39-42 ºC). La tarjeta gráfica es silenciosa jugando, por lo que el ruido se mantiene igual, por debajo de los 30 dB en las condiciones en que las mido y he comentado antes, aunque si se está cerca se puede escuchar un ligero murmullo muy muy bajo. En este juego el equipo consume unos 600 W, teniendo en cuenta que uso el ajuste 'trazado de rayos: sobrerrespuesta' con DLSS en 'rendimiento', sin interpolación, a 4K.

Cambiando a Total War: Warhammer III, en el que consume más la tarjeta gráfica, sobre los 400-410 W en lugar de unos 370 W como en Cyberpunk 2077, el procesador también consume algo más y el equipo se queda en unos 640-650 W. Pero al no tener activos los núcleos de trazado de rayos la situación de temperaturas de la tarjeta gráfica es mejor, sobre los 65 ºC, y la CPU sobre los 52-55 ºC, aunque tiene más picos de consumo mayor que pueden subirlo a 62 ºC frecuentemente.

Los resultados son los mismos con o sin la tapa puesta, por lo que la refrigeración instalada es más que suficiente para el equipo montado. Así que según lo indicado anteriormente, y frente a otros análisis que he hecho de otras cajas, puedo decir que con la configuración de esta semitorre se puede jugar en equipos montados que consuman 600 a 650 W con un ruido mínimo de 30 dB o menos, y eso sin afinar en cuanto a ruido. Hay un estupendo flujo de aire, con diez ventiladores, así que es imposible que se acumule calor en su interior con una configuración de gama alta como un 9800X3D y RTX 5090, o incluso con un procesador de mayor consumo

Conclusión

El diseño de doble cámara es uno que me gusta para las cajas, y sobre todo cuando se quiere primar el aspecto visual del equipo. NZXT tiene en la H9 Flow 2025 un modelo que abunda en todo lo bueno del modelo de 2023, pero con mejoras en el diseño externo más que en el interno, aunque también las haya. El reposicionamiento de los ventiladores del lateral derecho beneficia bastante al flujo de aire.

Pero como he dicho, la H9 Flow es una semitorre para exponer el PC que se monte. De otra forma, por su tamaño sería más bien una caja poco práctica y sobredimensionada para el terreno de las temperaturas. Con la actual calidad de las RLI y los ventiladores de caja, modelos más pequeños son más que suficientes para refrigerar perfectamente con bajo ruido cargas de incluso 600 W. Es una caja para situarla sobre la mesa y lucirla con orgullo, sobre todo por los conectores USB en la parte inferior de la caja.

Hay algún aspecto del diseño que no me termina de convencer pero tampoco lo veo como negativo. Hay que quitar algunos tornillos para retirar algunos paneles, pero en este modelo que están ya todos los ventiladores preinstalados no es un problema. No se puede rotar la zona de las ranuras PCIe, pero con el actual diseño de flujo a través de las tarjetas de alto consumo no es necesario ponerlas en vertical como ocurría antes. Así que la refrigeración tipo chimenea no se ve perjudicada. Como los ventiladores inferiores además están desplazados respecto a donde quedaría la tarjeta gráfica, es menos problema aún.

Puede que esta versión tenga un alto coste, sobre los 300 euros, pero si se le resta el precio de los ventiladores y el concentrador de conexiones, se quedaría más bien en una caja de unos 130 a 150 euros, por lo que hasta me resultaría barata. Siendo vistosa, amplia, de fácil montaje y con buenas posibilidades de expansión, es una de las cajas que debería estar siempre en una lista muy corta de modelos para los que buscan maximizar el aspecto visual y el rendimiento de sus equipos. Y posiblemente, por su precio y prestaciones, se podría poner fácilmente la primera de la lista.

Puntuación