AMD lleva unos años usando un diseño de módulos multichip para sus procesadores, aunque no para todos. Los de movilidad generalistas, principalmente portátiles y mini-PC, siguen teniendo una arquitectura monolítica y no parece que en el corto plazo la compañía vaya a cambiar su forma de fabricarlos. Preguntado por cuándo tomará la decisión, David McAfee, el vicepresidente y Gerente General de AMD ha indicado que mayormente es un tema económico y de consumo.

Cuando desarrollamos nuestros productos valoramos tanto las estructuras monolíticas y de chíplets, tanto para sobremesas como para portátiles. Sin embargo, en el caso de los portátiles, la introducción de los chíplets es un desafío debido a las limitaciones de consumo. Hay una penalización de consumo cuando adoptas los chíplets, por lo que el momento en el que introducirlos sería cuando merezca la pena asumir la penalización.

Hasta ahora, considerando estos factores, los resultados han demostrado que en el sector de los portátiles, una estructura monolítica es más económica y eficiente que la de chíplets. Si hubiera un incentivo para apartarnos de esta en el futuro, podríamos considerar los chíplets.

La compañía utiliza la arquitectura de chíplets en los portátiles de alto rendimiento que acompañan a las tarjetas gráficas más potentes porque su precio más que compensa el uso de los chíplets. Parte de esos mayores costes también tienen que ver con el mayor coste del testeo y el encapsulado al usar los chíplets para crear los procesadores. El mayor consumo procede de los intermediadores que hay que poner para conectar los chíplets, los cuales son activos y por tanto añaden un consumo adicional.

Vía: Videocardz.