La placa base W790 WS anunciada por ASRock es un ejemplo de los modelos que van a llegar al sector consumo para los Xeon W series 2400 y 3400. Conformarán estaciones de trabajo de alto rendimiento, monozócalo a diferencia de las placas base para los centros de datos. Tiene un factor de forma E-ATX con un tamaño de 27.7 cm × 30.5 cm. Se alimenta con un conector ATX, cuatro PCIe de ocho pines y un PCIe de seis pines, aunque eso será así si se ponen todas las tarjetas que permite.

Incluye ocho bancos de memoria para hasta 2 TB de DDR5 a 6800 MHz a través de XMP, así como cuatro M.2 2280 de tipo PCIe 5.0 ×4, cinco ranuras PCIe 5.0 ×16 y un conector U.2 (PCIe 4.0 ×4). Hay también un M.2 2230 para un combo de wifi y Bluetooth, viniendo ya con una tarjeta que proporciona Bluetooth 5.3 y Wi-Fi 6E (802.11ax-2021). Cuenta con un módulo de regulación de voltaje (VRM) de 20+2 fases (CPU más DRAM) de 90 A, condensadores negros 12K de Nichicon.

También cuenta con un códec de audio ALC897 de Realtek, y dos controladores Ethernet de tipo AQC113CS de Marvell de 10 Gb/s y otro I225LM de Intel de 2.5 Gb/s, por lo que en el panel trasero hay tres tomas RJ-45. En ese panel también hay dos Thunderbolt 4 (USB 4), cuatro USB 3.0, dos USB 3.1 y un SPDIF, junto con dos tomas de 3.5 mm y dos de antena.